El alcalde de Quito, Pabel Muñoz, en su viaje a Roma, Italia tuvo una visita corta con el Papa Francisco. En la conversación el alcalde aseguró al Papa que su visita sería un bálsamo para toda América Latina.
El alcalde de Quito, Pabel Muñoz, aún confía en que el papa visite la capital ecuatoriana en septiembre próximo, para el Congreso Eucarístico Internacional, a pesar de que la agenda papal puede complicarlo, aseguró este miércoles a EFE en Roma, tras reunirse con Francisco.
«Ha sido una conversación corta, pero lo suficientemente profunda para insistirle al papa sobre la importancia de que él pueda estar no solamente en Quito y en Ecuador, sino en el continente latinoamericano, porque, frente a los nuestros problemas cotidianos, su visita puede ser un bálsamo», dijo. Muñoz reconoció que el viaje del papa a cuatro países de Asia del 2 al 13 de septiembre «complicará mucho la posibilidad de que cambie de continente», pero agregó que aún así está «contento porque literalmente, ha dicho, voy a hacer el intento» y «tiene al Ecuador en el corazón».
En el encuentro, el alcalde le entregó presentes , entre ellos un “bargueño”, un mueble de madera tradicional de la escuela quiteña y que sirve, sobre todo, para guardar recuerdos. El alcalde Muñoz explicó al Santo Padre que en cada uno de los pequeños cajones podrá encontrar mensajes escritos en papeles por niños que reciben los servicios del Patronato Municipal San José. Además, se obsequió al Santo Padre una figura de la Virgen Corazón de María trabajada por un artista quiteño y una camiseta de la selección ecuatoriana de fútbol. (EFE/EC)