Así es el servicio en el bus 0576 de la línea El Camal-Floresta

Movilidad. Los problemas en las unidades de transporte se mantienen, no hay mejoras en la prestación del servicio.
Movilidad. Los problemas en las unidades de transporte se mantienen, no hay mejoras en la prestación del servicio.

Los problemas de exceso de velocidad e irrespeto a los usuarios se mantienen.

Mientras hay controles en otros puntos de la ciudad, a las 09:02 del lunes, la unidad 0576 que cubre la ruta El Camal-La Floresta inicia su recorrido desde el redondel de La Floresta hacia el sur de la ciudad.

Mientras el conductor está atento a lo que ocurre en la vía, el controlador, quien viste camisa blanca y corbata roja, pide a seis pajeros que se acomoden en los asientos de la unidad y anuncia que luego les cobrará el pasaje.

La unidad luce limpia y el trayecto es cubierto sin problemas hasta la Av. Colón y Reina Victoria. Ahí, una persona de la tercera edad pide al chofer que se detenga para bajar. El controlador no hace ningún intento de ayudarla.

El conductor espera pocos segundos y enseguida da marcha y los pasajeros le gritan que espere, pues el adulto mayor tiene dificultades para salir.

A partir de ese momento el viaje se torna problemático. Al continuar por las calles Versalles, 18 de Septiembre y La Manuel Larrea, la unidad irrespeta las paradas y rebasa a otros buses.

Males de siempre

En el trayecto, la gente sigue subiendo, los 37 asientos resultan insuficientes. Los usuarios se agolpan en el pasillo. El calor es insoportable y el aire se enrarece.

“La Napo, El Camal, Cinco Esquinas”, grita el controlador sosteniéndose de la puerta de embarque. Una señora que aborda se identifica como de la tercera edad y pide que se le cobren los 12 centavos. El ayudante, indispuesto por el reclamo, le devuelve el dólar que le entregó.

En el playón de La Marín con dirección al parque Cumandá, un bus del Corredor Sur Occidental se ubica en frente y el conductor de la unidad oprime el cláxon de forma insistente. Al llegar a la Av. Napo a las 09:55 deja a pasajeros en zonas no autorizadas. La unidad culmina su ruta a las 10:05. Usuarios como Marlon Pillataxi, morador de Chiriyacu señalan que el servicio fue malo y consideran que esto no cambiará en menos de 30 días. (PSD)

Denuncias de usuarios

Soledad Estupiñán, quien tuvo una mala experiencia en la unidad de disco 1111 de la Compañía Nacional, denunció que el conductor de ese bus permitió el ingreso de un sujeto que dijo que hasta las 19:00 tenía que juntar 80 dólares y que exigía que le ayudaran.

EL DATO
El 5 de octubre termina el plazo de 30 días para que los transportistas mejoren el servicio. A este caso se suma al de otros usuarios que reclamaron porque el fin de semana el conductor de un bus que se dirigía al Comité del Pueblo desde La Marín de placas PUH919 irrespetó tres semáforos en la Av. De Los Shyris cuando se dirigía a la Av. 6 de Diciembre.

Mi Opinión

‘Un tiempo muy corto’

Sergio Garnica

Concejal y miembro de la Comisión de Movilidad

Vamos a llegar a los 30 días y no se verán cambios. Es necesario trabajar con los transportistas, acercarles a los usuarios y trabajar en políticas y herramientas que permitan ir hacia una prestación eficiente del servicio.