‘Guaguas con voz’: Quito sí cree en sus niñas y niños

Prevención. María Fernanda Pacheco presenta a Lola y Pedro. 500 réplicas de estos muñecos llevarán un mensaje de respeto al cuerpo infantil. El plan combina juego, diálogo y enfoque de derechos.
Prevención. María Fernanda Pacheco presenta a Lola y Pedro. 500 réplicas de estos muñecos llevarán un mensaje de respeto al cuerpo infantil. El plan combina juego, diálogo y enfoque de derechos.

María Fernanda Pacheco, presidenta del Patronato, presenta esta campaña contra la violencia sexual.

¿La sociedad ecuatoriana mira a niñas y niños como sujetos de derechos o persiste el enfoque que los minimiza?
Todavía tenemos que hacer un fuerte trabajo en el esquema de restitución de derechos. Durante muchos años se trabajó el desarrollo infantil desde un punto de vista asistencialista en el cual ellos eran prácticamente un adjunto de un núcleo familiar, pero que no tenían peso por sus decisiones y sus derechos. La tendencia mundial, a tono con los objetivos de desarrollo sostenible, claramente habla de niñas y niños como sujetos de derechos. Esto va desde temas como trabajo infantil hasta abuso infantil. Partiendo de esa autocrítica, una de las mayores dificultades que hemos tenido como sociedad es naturalizar ciertos comportamientos de violencia y de abuso. Se han generado espacios de poder en los cuales los adultos creen que tienen la obligación de decidir y mandar.

¿Cómo, entonces, se rompe el lastre transgeneracional por el cual los adultos no creen en los niños?
En la medida en que hacemos un proceso de concientización sobre comportamientos que no son normales. Cuando un niño crece en un hogar en que la violencia es cotidiana, eso se ve como un comportamiento regular. Y estas situaciones se perpetuaban porque se silenciaban, por eso nuestro proyecto ‘Guaguas con voz’ está enfocado no desde la sanción y no desde estigmatizar a la escuela. Esto va desde mirar a niñas y niños como sujetos de derechos: enseñarles a hablar, enseñarles que ellos tienen voz. Y nosotros como sociedad tenemos la obligación de creerles y darles seguimiento a sus procesos, porque, por ejemplo, hay dos casos diarios que se denuncian en el Consejo de la Judicatura. También sabemos que el 25% de niños violentados no dice nada y al 33% no le creyeron. Con estas estadísticas estamos diciendo que no generamos condiciones de seguridad y, además de eso, no les creemos y no les apoyamos para que lo puedan comunicar.

¿Cuánto pesan factores culturales por los cuales no llamamos pene a lo que es pene, o vagina a lo que es vagina y, por ello, no se respeta el cuerpo de niñas y niños?
Es fundamental que los niños se sientan seguros de llamar a su cuerpo por los nombres que le corresponden. Pero nuestro punto de partida es aquel momento en que un niño ni siquiera puede decir “me siento mal, tuve un problema, por favor créeme”. Como todo cambio genera resistencia, no queremos ser invasivos y, más bien, queremos involucrar a los padres. Por eso empleamos un lenguaje sencillo.

Una estrategia lúdica para generar un vínculo emocional entre niñas, niños, padres y maestros…
Exactamente. Como sociedad debemos entender que las familias están conformadas de distintas estructuras.

Y hay distintas familias…
Hay distintas familias e invitamos a que la sociedad también madure para que los niños sientan cada vez canales más seguros, sea su abuelo, sea su tía, su hermano mayor. Frente a este entorno, cuál era la mejor manera de de seguridad a los niños: generar diálogo desde el juego.

Para ello la campaña se apoya en Lola y Pedro. ¿Qué mensajes brindan estos muñecos?
Ellos nos van a presentar qué partes de sus cuerpos no deben ser tocados. Tenemos 500 parejas de muñecos y ellos van a pasar unos días con los niños de nuestros 134 Guagua Centros (una red con 73.000 beneficiarios directos). Así queremos conscientizar a toda la familia. Tenemos una estrategia profunda detrás, con materiales de Amnistía Internacional, Unicef y una iniciativa de México de restitución de derechos. Entonces, cuando se activen los muñecos escucharemos: “Esta parte de mi cuerpo solo puedo tocarme yo. No es un juego. No me toques ahí. Si lo haces, voy a gritar. Si tocas mi cuerpo voy a contar lo que estás haciendo”.

Esto rompe los círculos de secuestro y silencio al cual los agresores someten a niñas y niños…
Así incidimos para que desde pequeños los niños vayan creciendo con estos mensajes. Así atacamos el hecho de que el 80% de más de 2.000 embarazos en menores de 14 años ocurre en entornos familiares.

El lunes, madres del Guagua Centro Ipiales ya conocieron la campaña. ¿Qué reacciones hubo?
No vimos caras de tabú. En ninguna religión, en ningún esquema, en ninguna palabra está permitido que se toque las partes íntimas de los niños. Logramos un discurso universal, que no discrimine a nadie. Es una estrategia inclusiva y que apunta a la restitución de derechos. (IFP).

Nunca calles: líneas de ayuda
° Cuando tengas un problema o sufras una agresión, la Alcaldía de Quito pone a disposición este número: 1 800 ACOLITA. También puedes comunicarte con la línea
1 800 42 42 42.

° En la página web www.patronato.quito.gob.ec cuentas con un chat activo de lunes a viernes, entre 10:00 y 18:00. Ubícalo en el cabezote del sitio, a la derecha, bajo la etiqueta #MásQueUnReflejo. Encontrarás a dos sicólogas para escucharte.

° En WhatsApp puedes encontrar ayuda en el 099 678 3483. Orientación, denuncias, acompañamiento, con enfoque de derechos.

° Si eres víctima de acoso en el transporte, puedes reportarlo a través del programa #BájaleAlAcoso. Envía un mensaje de texto con la palabra ACOSO al 6367. También indica el número de la unidad en la cual te estás movilizando.

Frases

Hacemos una invitación formal al Ministro de Educación para que deje de lado cualquier postura política y en Quito nos deje entrar en escuelas fiscales”.Queremos generar condiciones para que en aquellos casos en que hubo abusos podamos trabajar en la restitución de derechos y en una reparación integral”.