Con una marcha fúnebre se recordó a víctimas de tránsito

Ceremonia. A las víctimas de accidentes de tránsito se ofreció una procesión que recorrió la Naciones Unidas y Amazonas.
Ceremonia. A las víctimas de accidentes de tránsito se ofreció una procesión que recorrió la Naciones Unidas y Amazonas.

Familiares exigen justicia para las víctimas y a los conductores les piden respeto a la vida de las personas.

Anualmente el tercer domingo de noviembre se recuerda a las víctimas de accidentes de tránsito en Quito. Ayer los familiares ofrecieron una mañana de luto y una procesión en su memoria. La partida fue desde el estadio Olímpico Atahualpa y llegó hasta la Cruz del Papa.

La marcha fúnebre entonada por la banda de la Policía Nacional acompañó a la procesión que partió de las inmediaciones del estadio Atahualpa donde fue el punto de encuentro. Cadetes de la institución transportaron ataúdes de niños y adultos simbolizando las muertes en manos de conductores.

Familiares de las víctimas que participaron de la procesión levantaron pancartas con los nombres de los fallecidos- “Yo soy Dome”, decía uno de ellos. Su tía Kathy Navarro contó que falleció en un accidente de tránsito un 3 de septiembre, en la vía a Guayllabamba.

La madre de familia dijo que saben quién fue el causante de su muerte y que la familia está haciendo los trámites respectivos y esperando que se haga justicia. Según Navarro, la culpable evadió su responsabilidad y salió del país hacia Colombia.

Ella pide a las autoridades que trabajen más en la cultura del conductor, que en las escuelas no solo debe guiarse en el tema de operar una máquina sino que tienen que tomar conciencia que hay vidas humanas en las calles a las que hay que respetar.

“Lamentablemente las personas, una vez que tienen las licencias pasan uno, dos años y se olvidan del respeto que deben tener en las carreteras. Se debe ofrecer una capacitación continua para que respeten la vida de las personas”.

María del Carmen de La Torre, Presidenta de la Fundación Corazones en el Cielo, dijo que cada año unen a más personas comprometidas con el reto de reducir la terrible pandemia que son las muertes por accidentes de tránsito. “Día a día cobra la vida de inocentes”, dijo.

Recalcó que no se maneja con estadísticas, porque su hijo Juan Marco fue una de las víctimas de los accidentes de tránsito y no es un número, no es una estadística. Hizo un llamado a la conciencia de los conductores para que respeten las vidas de las personas.

Juan Zapata, secretario de Seguridad y Gobernabilidad del Municipio de Quito, dijo que es un día muy doloroso por todo lo que deja la accidentabilidad. “Si el 92% de los accidentes de tránsito es atribuido al factor humano allí hay que trabajar en capacitación y en concienciación”, reflexionó.

Informó que hace unos días hizo unas evaluaciones en la provincia de Carchi y a escala nacional a más de 40.000 conductores y los resultados son malos, 4/20 un balance general. “Hace falta capacitación y la poca gente que está capacitada no está concienciada, porque sabe cuáles son los límites de velocidad pero no los respeta”, acotó.

EL DATO
El proyecto Corazones Azules se cerró hace más de siete años y no habido una nueva iniciativa al respecto.Hizo énfasis en las cifras de las Organismos no Gubernamentales donde se dice que hay entre 13 y 15 fallecidos diarios.

“Se trata de un problema evitable. No es una enfermedad. Si la causa son los excesos de velocidad, cumplamos la norma y no pasa nada, no manejar si ha ingerido licor, por ejemplo”, puntualizó. (PSD)