En el sector periférico de la capital se continúa promocionando el producto con el uso de la bocina.
La venta de los cilindros de gas apoyados en elementos sonoros no está autorizada dentro del Distrito Metropolitano de Quito. La sanción es de un salario mínimo vital (375 dólares) o dos, en caso de reincidencia.
Carmen Rosales, de San Juan, denunció que todavía hay distribuidores que durante los fines de semana insisten en utilizar el pito y la canción. “Es un ruido que fastidia”, se quejó.
Verónica Arias, secretaria de Ambiente, aclaró que por ocho meses han venido trabajando en mesas con los distribuidores y que jamás se dio luz verde para que utilicen la música de forma temporal.
“La prohibición está expresa en la ordenanza y no hay música ni tampoco se les permite la utilización del pito en el momento de comercializar el gas, está prohibido”, añadió.
Hizo un llamado a los distribuidores para que corrijan el uso de elementos sonoros porque generan contaminación acústica y les recordó que pueden optar por aplicativos que ofrecen las redes sociales, tipo app, en línea.
Dijo que tanto la Agencia Metropolitana de Control como la Agencia Metropolitana de Tránsito tendrán que aplicar la ordenanza.
Susana Ñacato, de la Asociación de Distribuidores de Pichincha, dice que se les está permitiendo trabajar con la canción, pero que son sujetos de sanción cuando no tienen y utilizan el pito, esto principalmente en el sector periférico.
Otro de los mecanismos para llegar a los clientes es la entrega de tarjetas. Lamentó que aún hay gente que se molesta por el uso de la música, pero dice que es la forma más eficiente para que la gente salga de las casas y adquiera el producto. (PSD)