Mejoramiento de la vía Calacalí-Río Blanco inicia con minga

Inauguración. El prefecto Gustavo Baroja (izq.) organizó una rueda de prensa para dar a conocer el plan de mejoramiento de la vía.
Inauguración. El prefecto Gustavo Baroja (izq.) organizó una rueda de prensa para dar a conocer el plan de mejoramiento de la vía.

La carretera volvió a manos de la administración del Gobierno de Pichincha.

Una inversión cercana a los 18 millones de dólares será necesaria para la primera parte del plan de mejoras que el Gobierno de Pichincha comenzó ayer en la vía Calacalí – Río Blanco.

El inicio de los trabajos en la carretera se dio con una minga de la comunidad, en presencia del prefecto Gustavo Baroja y de su equipo de trabajo.

Esta acción se concreta luego del traspaso de la administración de la vía que une la Sierra y la Costa, antes en manos del Ministerio de Trasporte, y que luego de cuatro años y ocho meses pasa de nuevo a manos de la Prefectura.

“La vía estuvo abandonada. En esta zona estaban descuidados temas tan importantes como la salubridad y la seguridad”, dijo Baroja en declaraciones a la prensa. “Es de machos manejar en esta vía”, agregó.

Al respecto indicó que existen zonas de alto riesgo a lo largo de la vía. Citó como ejemplo los kilómetros 72 y 51 en donde existen taludes a punto de derrumbarse, o en donde ya se han registrado accidentes. También aseguró que se ubicaron 600 alcantarillas colapsadas y hasta la falta de señalización y de pintura.

“Aquí, prácticamente, ya se ha ido parte de la estructura de la vía. Esto se debe a la falta de mantenimiento de la alcantarilla que está colapsada en la parte inferior”, dijo sobre el kilómetro 72, en donde la intervención será inmediata.

Trabajos

Con una extensión de 163 kilómetros, esta carretera ahora entra en una primera etapa de mantenimiento y recuperación que comienza con la limpieza de cunetas y rebacheo para luego pasar al establecimiento de señalética, y construcción de otras obras como la ampliación y fortalecimiento de los centros de salud.

También está previsto crear un sistema de atención permanente de ambulancias para esta vía, un servicio de vulcanizadoras gratuitas, servicios de grúas, mecánicas, y mejorar el sistema de cobertura de telefonía móvil con la instalación de repetidoras. Además, garantizó la iluminación en toda la vía, que requerirá de una inversión de 5 millones de dólares.

Esta primera tendrá un costo de 18 millones de dólares, monto que cubrirá los trabajos desde Calacalí hasta San Tadeo. Baroja indicó que se están realizando los estudios para determinar el costo que tendrá la continuación del plan de rehabilitación de la vía desde ese punto, hasta el puente sobre el Río Blanco, y que el financiamiento será asumido por la Prefectura.

Luego de las acciones emergentes, la empresa pública de la prefectura Hidroequinoccio se hará cargo del mantenimiento de la vía. Esa institución será la encargada de colocar dos puestos de peajes. Los lugares y el monto a cobrar todavía no están determinados. (LGP)

«Es de machos manejar en esta vía”.

Gustavo Baroja,
prefecto de Pichincha, sobre la vía Calacalí – Río Blanco.

Carretera. Ciudadanos trabajan en la minga.
Carretera. Ciudadanos trabajan en la minga.