“Necesitamos decisión política por parte del Alcalde de la ciudad (Mauricio Rodas). Desde hace largo tiempo venimos proponiendo nuestra inversión privada para renovar con articulados eléctricos las unidades de transporte”, comentó Ney Jiménez, presidente del consorcio que administra el corredor Centro Norte o Metrovía.
La decisión política a la que hace referencia va en la línea de que la municipalidad y el Gobierno central se pongan de acuerdo para generar las condiciones y facilidades necesarias para que el sector privado asuma la importación de vehículos eléctricos para el transporte público de la ciudad.
“Nosotros ya propusimos ofrecer un transporte 100% eléctrico desde el Seminario hasta la Marín, en el corredor Centro Norte, pero no hemos recibido una respuesta afirmativa del Municipio. Todas las inversiones correrían por nuestra cuenta, siempre y cuando se generen requisitos básicos”, acotó Jiménez
El primero de esos pedidos es que Mauricio Rodas haga las gestiones necesarias para que el Gobierno central transforme el subsidio al diésel en un estímulo para la compra de automotores eléctricos.
“En los últimos 10 años, cada unidad de transporte público que funciona con diésel ha recibido como subsidio a los combustibles aproximadamente 200.000 dólares anuales. Lo que pedimos es que en lugar de seguir gastando en eso, los dineros vayan para la inversión en articulados no contaminantes”, indicó.
El segundo requisito tendría que ver con que se creen incentivos tributarios.
“Es un buen negocio para la ciudad y para el Gobierno central porque se reduce la contaminación ambiental y se compensa la discusión de impuestos con la menor importación de combustibles”, puntualizó Jiménez.
Reunión para tomar decisiones
Esta semana se espera que se lleve a cabo una reunión pendiente entre los administradores del corredor Centro Norte, el Alcalde y la Secretaría de Movilidad.
El objetivo sería analizar y tomar decisiones en base al plan de negocios presentado por el consorcio privado para renovar la flota con vehículos eléctricos de la Metrovía.
“Si hay resultados positivos y luego de que se termine el periodo de prueba del articulado eléctrico que está funcionando desde diciembre pasado, iniciaríamos con el proceso para adquirir una nueva flota 100% no contaminante”, concluyó Jiménez.
Las unidades tendrían las mismas características que el bus en prueba, es decir, contarían con una capacidad para 160 pasajeros, vida útil de por lo menos 15 años y una autonomía de traslado de tres horas sin necesidad de conexión con una fuente eléctrica. (JS)