Kratos, el primer perro bombero de Quito se jubiló

CEREMONIA. Scarlet Charro y su hijo reciben a Kratos como nuevo integrante de su familia.
CEREMONIA. Scarlet Charro y su hijo reciben a Kratos como nuevo integrante de su familia.

El primer perro de la Unidad Canina de Bomberos se jubiló ayer con honores.

Era abril de 2016 y todo Ecuador sentía la pérdida de cientos de vidas en el terremoto de 7,8 grados en la escala de Richter, que tuvo como epicentro Pedernales (Manabí). Lugares como el centro comercial Felipe Navarrete, de Manta, pasaron a la historia por su colapso.

En esos días, cuando todos salían corriendo para alejarse lo más posible, ‘Kratos’ junto a la Unidad Canina de Bomberos de Quito corrían directo a las zonas del desastre para brindar su ayuda.

El golden retriever, que en ese entonces tenía 5 años, identificaba con agilidad los sitios donde podría haber gente atrapada. Gracias a su olfato, sus compañeros bomberos lograron rescatar con vida a cuatro personas.

Las anécdotas quedan en la memoria de David Durán, uno de los fundadores de la Unidad Canina de Bomberos de Quito, quien con nostalgia le dijo adiós al compañero de trabajo que lo acompañó durante casi tres años.

Haciendo honor al nombre del dios griego, que representa la fuerza y el poder, ‘Kratos’ participó también en las actividades de búsqueda y rescate, en Ciudad de México, después del terremoto de septiembre de 2017.

DÚO. David Durán y ‘Kratos’ fueron compañeros de trabajo durante casi tres años.
DÚO. David Durán y ‘Kratos’ fueron compañeros de trabajo durante casi tres años.

Despedida con honores
Un collar de ‘civil’ reemplazó al pequeño chaleco rojo que identificó a ‘Kratos’ como héroe bomberil desde 2016. Ayer durante una ceremonia de despedida, Durán realizó el cambio.

“Bombero por un día, bombero para siempre”, se escribió en la placa que llevará de ahora en adelante. A sus siete años, ‘Kratos’ vivirá con una familia adoptiva. Esto después de que cumplió una serie de pruebas en las que se determinó que su agilidad ya no era la misma de antes y era necesario que se tome un descanso.

Al despedirse de él, Eber Arroyo, comandante del Cuerpo de Bomberos de Quito, recordó que el Golden Retriever llegó desde Carchi con pocos años y fue el primer perro que conformó la Unidad. Fue su presencia la que motivó a los miembros de la casaca roja a iniciar con la iniciativa que ahora se proyecta para muchos más años.

Luego de los aplausos y conmemoraciones, lo esperaban Scarlet Charro y su hijo de 4 años, quienes serán su nueva familia. Ella es bombera activa y hace unos meses aplicó al proceso de selección interna que se realizó para la adopción de ‘Kratos’. “Ahora seremos tres”, dijo la quiteña con una sonrisa y agregó que el amigo de cuatro patas será más que una mascota, un miembro de la familia. (PCV)

ENTRENAMIENTO. En las nuevas instalaciones de la Unidad Canina de Bomberos Quito, en la Mitad del Mundo, hay una zona para práctica.
ENTRENAMIENTO. En las nuevas instalaciones de la Unidad Canina de Bomberos Quito, en la Mitad del Mundo, hay una zona para práctica.

Nuevas instalaciones
° Ocho perros bomberiles estrenaron desde ayer las nuevas instalaciones de la Unidad Canina de Bomberos Quito, ubicadas en en la Av. Los Shyris, cerca al Kartódromo de San Antonio de Pichincha. Seis de ellos se especializan en tareas de búsqueda en estructuras colapsadas y dos en tareas de búsqueda en grandes áreas con olor de referencia. Ellos podrán formarse en el lugar que está en el interior de la Estación de Bomberos Nº 15.

Ahí hay capacidad para 10 perros bomberos y se adecuaron espacios para clases, atención veterinaria, recreación entrenamiento y dormitorios para los guías. La Unidad Canina de Bomberos de Quito, actualmente, está conformada por dos cabos y cinco bomberos quienes han participado en cursos de formación. En la estructura y su adecuación se invirtieron 52.328,71 dólares.