Downhill: adrenalina al máximo

Concentración. Hay que mantener la mirada fija hacia delante, para  anticipar los obstáculos.
Concentración. Hay que mantener la mirada fija hacia delante, para anticipar los obstáculos.
Apoyo. Familias asisten al Ungüí para acompañar a sus allegados.
Apoyo. Familias asisten al Ungüí para acompañar a sus allegados.
Destreza. El frenado se lo realiza en un 70% con el freno delantero y un 30% con el trasero.
Destreza. El frenado se lo realiza en un 70% con el freno delantero y un 30% con el trasero.
Aprendizaje. Las caídas son parte de este deporte.
Aprendizaje. Las caídas son parte de este deporte.
Fundamental. Casco, pechera, guantes… La protección es importante.
Fundamental. Casco, pechera, guantes… La protección es importante.
Especial. Las bicicletas de downhill tienen una suspensión que permite un mayor control al momento del descenso.
Especial. Las bicicletas de downhill tienen una suspensión que permite un mayor control al momento del descenso.

TEXTO Y FOTOS: Javier Parra

Un deporte de riesgo es lo que se vive en el Parque Chilibulo, en el Cerro Ungüí, en Quito, donde cientos de jóvenes, adultos y hasta niños practican downhill desde 2003. Decenas de deportistas recorren una pista que tiene aproximadamente 3,5 km con varios niveles de dificultad, como unos grandes saltos no aptos para cardíacos.

Las categorías de la competencia varían entre novatos hasta los Pro-Élite, quienes son los que dominan cada curva y salto, alcanzando velocidades de hasta 100km por hora.

Mucha fuerza en los brazos, resistencia, habilidad y los sentidos al 100% se necesita para completar la ruta; además de contar con un equipo de seguridad: casco, gafas, pechera, rodilleras, coderas y zapatos adecuados.

En las válidas se cuenta con equipos de apoyo para los corredores, ambulancia con paramédicos y miembros del Cuerpo de Bomberos para precautelar la seguridad de los participantes.