El Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (Cpccs) fue posesionado y escogió a sus autoridades en medio de fuertes divisiones internas. La sesión de elección, conflictiva por la presencia de las barras que interrumpían a cada momento, hace prever cómo operará este Consejo electo en las urnas.
Una mayoría integrada por Walter Gómez, José Carlos Tuárez, Victoria Desintonio y Rosa Chalá designó como presidente al sacerdote Tuárez, y como vicepresidenta a Chalá.
En otro grupo, Christian Cruz y Sofía Almeida, quienes se mocionaron y votaron entre ellos sin mayores posibilidades. Por último, María Fernanda Rivadeniera, en solitario, se abstuvo.
Las indirectas no se hicieron esperar. “No se ha respetado la voluntad popular sino que se han hecho acuerdos volviendo a la politiquería que tanto daño le ha hecho al país”, manifestó Rivadeneira, quien reclamaba la presidencia al ser la más votada en las urnas.
Almeida dijo que jamás se entregaría a fuerzas que han hecho mucho daño al país, “que saquearon la Patria”. Desde el banco contrario, Gómez respondió que daba su voto por Ecuador, para evitar “la mano de politiqueros que eligen a dedo a nuestras autoridades”.
Desintonio cuestionó a consejeros que hablaron de la necesidad de tener un organismo independiente, pero que “se reunieron a espaldas del pueblo queriendo eliminar” al Cpccs.
Ambiente previo
Lo sucedido en la sesión reflejó lo que pasó en la Asamblea durante la posesión. El legislador de CREO, Marcelo Simbaña, dijo que se iba a cometer una ilegalidad al posesionar a Tuárez, debido a su condición de sacerdote. Simbaña fue abucheado por la bancada correísta y el propio sacerdote gesticulaba molesto e indignado a la distancia. El correísmo fue quien más festejó la posesión del nuevo Consejo. El asambleísta Carlos Viteri (RC) llevó un cartel que decía: “A recuperar el Estado de Derecho”.
Terminada la posesión se vivió la conformación de los grupos. Cruz y Almeida comparecieron juntos a una rueda de prensa. En la puerta esperaba Rivadeneira. Cruz le invitó a dar declaraciones conjuntas, pero Rivadeneira prefirió hacerlo por su cuenta. Terminada su intervención, ingresó Tuárez para dirigirse a los medios. Extra micrófonos se refirió a Simbaña como “majadero e inmaduro que (ustedes) saben lo que hizo en el pleno”.
Mientras que Chalá y Gómez, junto a otros tres consejeros suplentes, tomaron su camino y se dirigieron al parque El Arbolito para una posesión ancestral. (HCR)