El alcalde, Jorge Yunda, presentó un proyecto de reforma al Código Orgánico Integral Penal (COIP), en contra del maltrato a la fauna urbana. Lo hizo ante la presidenta de la Comisión de Justicia de la Asamblea, Ximena Peña.
La propuesta la hizo tras conocer los casos de envenenamiento masivo de 31 perros en tres refugios de Quito y otros 10 en Malchinguí.
Previamente, el coordinador de Urbaninal, Pablo Arias, dijo que todavía están a la espera de las pruebas toxicológicas de laboratorio y las opiniones de veterinarios especializados sobre el alimento donado que produjo la muerte de los canes.
“El envenenamiento de perros ha sido común en Quito. Recién hubo un caso de un perrito que iba en moto con el dueño y luego hubo un envenenamiento de tres perros. Creo que esto siempre ha sido el ‘pan de cada día’. Lo que llama la atención es que hoy fueron tres centros”, lamentó.
Arias ofreció esta declaración a un medio radial antes de ingresar a una nueva reunión con el alcalde, Jorge Yunda, para informar sobre las medidas acordadas con los refugios y organizaciones animalistas, entre ellas el restringir la recepción de donaciones a condición de que los donantes presenten copia de cédula.
El último caso de envenenamiento masivo, que afectó mortalmente a 10 perros con similares entregas de donaciones de comida, se produjo entre el sábado y domingo anterior, confirmó la organización animalista, Patitas Callejeras.
“La señora que cuida el centro dice que el sábado fue gente en una camioneta roja y regaló comida para perro. Mi perrito la ingirió y murió la madrugada del domingo”, denunció Quinata.
La activista animalista lamentó la falta de una respuesta oportuna del ECU-911 a insistentes llamados telefónicos por parte de la cuidadora para que atendieran al perro en cuanto empezó a sufrir los efectos del envenenamiento. (JCER)