La ciudad avanza hacia el transporte público eléctrico

Antecedentes. En Quito circulan dos buses eléctricos.
Antecedentes. En Quito circulan dos buses eléctricos.

La puerta para que el transporte público cambie el diésel por la electricidad se abre de poco en la ciudad. La experimentación empezó hace dos años con un bus articulado de 18 metros, que ingresó al Corredor Central Norte.

Ahora, la implementación de estos vehículos ha tomado fuerza al entrar en vigencia la Ley de eficiencia energética, donde se señala que para 2025 todos los buses públicos e interprovinciales deberán ser eléctricos.

Recorridos piloto
Ángel Coyago, gerente de post venta de BYD Ecuador, señaló que además del articulado en la capital hay un bus urbano de 12 metros, en el que realizó un recorrido con el alcalde, Jorge Yunda, para explicarle el funcionamiento y tecnología de estos automotores.

“Están operando todos los días sin ningún inconveniente”, dijo al señalar que una de las ventajas de migrar a este transporte es la disminución de la contaminación al no generarse esmog y no emitir ruidos.

Al finalizar el paseo alrededor del parque La Carolina, Yunda dijo que los pulmones de los quiteños ganarían al implementar esta tecnología. “Se acaba el subsidio del combustible fósil que a la larga todos los ecuatorianos pagamos miles de millones de dólares”.

La ley de eficiencia energética dispone que los municipios garanticen incentivos que promuevan la compra de carros y buses de este tipo. Ante esto, Yunda reiteró que dará facilidades a los transportistas, una de ellas el aumento de la tarifa.

El cambio, acotó Yunda, tendrá que ser mantenido y sostenido, “queremos que se comience con 40 con 50 buses y paulatinamente se vaya migrando. Tenemos alrededor de 2.600 buses en la capital, lo ideal sería que al final de nuestra administración tengamos una gran parte del parque automotor con energía eléctrica”.

Yunda indicó que los carros particulares que se sumen tendrán facilidades como el salvoconducto en el Pico y Placa. Según el Municipio, en Quito circulan, diariamente, 300 vehículos livianos eléctricos, para quienes el servicio de recarga se encuentra de manera exclusiva en los concesionarios automotrices. Por lo que, el pasado 22 de junio se firmó un convenio de cooperación para la instalación de 10 electrolineras en estacionamientos municipales.

Altos costos
Jorge Yánez, presidente de la unión de operadores de trasporte urbano de Quito, dijo que la industria a la que representa no puede quedarse estática ante la tecnología.

Agregó que, para empezar, necesitarían adquirir 90 unidades de 12 metros para que sean alimentadores del Metro. Para eso requerirán entre $70 millones y $90 millones, tomando en cuenta que cada bus cuesta $600.000, tres veces más que un bus convencional.

Sin embargo, destacó que los costos de mantenimiento de los buses eléctricos son menores, dependiendo de la durabilidad de la batería. La máxima dura siete años. “El cambio depende del acuerdo que tengamos con la alcaldía y el Gobierno”, acotó. (AVV)

Europa está a la cabeza
° Un reportaje realizado por la BBC muestra que, pese a que la cifra de ventas de vehículos eléctricos en China y EE.UU. es considerable, la cuota de mercado sigue siendo baja.

Europa es el continente donde el uso se autos eléctricos se presenta en mayor proporción. Noruega y Holanda tienen el mayor número de buses públicos eléctricos del mundo.

En América Latina, el referente es Chile que cuenta con 203 unidades, que han representado un cambio radical a la movilidad. En un censo realizado en el país del sur los usuarios calificaron al servicio con 7,6 sobre 10.

En nuestro país, Guayaquil inició la migración, al incorporar a sus calles 20 buses eléctricos. El costo del pasaje es de 35 centavos.