Normativas ambientales más estrictas para Quito

La Secretaría de Ambiente de la capital busca generar normativas más estrictas que permitan la eliminación de plásticos de un solo uso. Se estima que en Quito se generan diariamente 277,35 toneladas desechos plásticos y no existe una herramienta legal para su control y eliminación, explicó Marianella Irigoyen, secretaria de Ambiente.

En agosto de 2018, durante la gestión de Mauricio Rodas, se lanzó la campaña ‘Sin sorbete por favor’, que buscaba reducir el uso de dicho material que, según el Ministerio del Ambiente, se demora entre 100 y 500 años antes de fraccionarse en pequeñas partículas tóxicas que contaminan masivamente el ecosistema.

A la campaña que inició con 22 establecimientos se sumaron otros, llegando a ser más de 100. Eso dio paso a la segunda socialización llamada ‘Sin funda gracias’, que buscaba cambiar las fundas por bolsas de yute en los mercados municipales.

Pero para Irigoyen no se trata solo de mantener este tipo de campañas sino de tener normas más fuertes, que obliguen a los establecimientos y ciudadanos a remplazar por completo los plásticos de un solo uso. “Queremos hacer un cambio paulatino pero un cambio estricto”, señaló.

Cambios simbólicos
A finales de mayo, el Concejo Metropolitano acordó prohibir los plásticos de un solo uso en entidades municipales. Eduardo Del Pozo, concejal, manifestó que la resolución aprobada es “algo simbólico e indispensable, pero hay que ir a lo de fondo”.

Por lo que presentó una propuesta que sintetiza otras, como establecer incentivos y sanciones, para disminuir el plástico de un solo uso en toda la ciudad hasta el primero de enero de 2023 cuando la prohibición sería total.

Sin embargo, Irigoyen no detalló en qué tiempo se estima que Quito sea libre de plástico, aunque sí precisó que la medida apunta a una gestión donde la economía sea circular y no todos los desechos lleguen al relleno. (AVV)