Comercio por el retorno a clases no despega en el Centro Histórico

Oferta. En el Centro Histórico hay varias tiendas dedicadas a la venta de útiles, uniformes y calzado escolar, pero los clientes no llegan.
Oferta. En el Centro Histórico hay varias tiendas dedicadas a la venta de útiles, uniformes y calzado escolar, pero los clientes no llegan.

Incertidumbre. Ese es el sentimiento generalizado de los pequeños vendedores de útiles escolares, uniformes, mochilas y zapatos en el Centro Histórico. Tomando en cuenta que en agosto se inicia la movida escolar, por ser época de matrículas y por el pago del décimo, los comerciantes llevan más de 20 días esperando a los clientes, pero estos no llegan.

Desde la avenida Pichincha, Playón Central se puede observar una calle Chile abarrotada de usuarios. Se pensaría que es a consecuencia de que el comercio se reactivó por el retorno a las aulas y la gente ha salido a aprovechar las ofertas que se tienen por la temporada.

Pero se confirmó que no es así. Ayer, al acercarce a los negocios, es evidente que están vacíos y que la gente que está en los alrededores son participantes del ciclopaseo, que cruza por este sector o son feligreses que concluida la misa se disponen a retornar a sus hogares.

Ambiente
Sobre la calle Chile, en el tramo entre la Flores e Imbabura en sentido oriente -occidente hay unos seis locales de venta de mochilas.

La variedad en colores los hace llamativos, hay en todos los tamaños, unos tienen ruedas y otros con estampados. Su costo varía entre los $5 y los $30 pero no hay compradores.

Pedro Paguay, administrador de una de los negocios de venta de mochilas dice que actualmente un 15% de los comerciantes del sector se ha dedicado a la venta de esta mercadería. A la acogida de parte de los usuarios la calificó de regular, pero, calcula que ha bajado un 50% en relación al año anterior.

Luis Taipe, padre de familia acudió en busca de una mochila y reconoció que hay de todo precio, pero a su criterio en los mercados están más baratas que en las tiendas del Centro Histórico; piensa que se debe a que son caros los arriendos.

EL DATO
El uso de los zapatos del año anterior es una de las opciones que tienen los padres de familia, frente a la falta de dinero.¡Mochilas de remate!, grita un comerciante frente a la iglesia de La Merced. Reveló que ante la poca acogida no le queda otra alternativa que rematar el precio de la mochila y las empezó a ofrecer a $10. “Llevó más de 20 días esperando que llegue la gente”, dijo.

Una similar situación experimentan los vendedores de los útiles en las papelerías económicas. Al visitar una de ellas, en la intersección de la Benalcázar y Bolívar el propietario Carlos Flores dijo estar preocupado porque la asistencia de los compradores es mínima.

La bodega de Flores tiene más de 15 años en el sector, él atribuye la baja de la venta a dos factores las listas de útiles todavía no se entregan en los diferentes establecimientos educativos y la restricción en la economía.

Informó que el costo de los útiles entre los establecimientos educativos varía. Mientras en los fiscales la lista de útiles tiene un valor de entre $25 y $35, en los particulares es de $90 y $120, solo útiles escolares, no incluyen libros.

Los vendedores de calzado también están a la espera de los clientes. Con rótulos anuncian que mantienen descuentos de hasta un 20%, sin embargo, son contados los padres de familia que ingresan a los locales. (PSD)