La coyuntura del paro se trasladó a las redes sociales

MOLESTIA. En la calle también se evidenciaron inconvenientes entre la sociedad civil.
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MOLESTIA. En la calle también se evidenciaron inconvenientes entre la sociedad civil.
MOLESTIA. En la calle también se evidenciaron inconvenientes entre la sociedad civil.
MOLESTIA. En la calle también se evidenciaron inconvenientes entre la sociedad civil.
MOLESTIA. En la calle también se evidenciaron inconvenientes entre la sociedad civil.

Tras 12 días de convulsión también se han evidenciado amistades resquebrajadas.

Las redes sociales se convirtieron en un espacio de debate tras las últimas protestas protagonizadas en el país. En ocasiones, los usuarios, además de generar un debate, incluso llegaron a perder sus amistades, tras defender sus opiniones.

Es el caso de Alejandro Calero, de 29 años, quien tras un cruce de palabras con su vecino, rompió una amistad de años. “Él se puso muy grosero, hasta con mi familia. Casi nos vamos a los golpes. Me da pena porque algo que no nos afectaba ni a él ni a mí terminó con nuestra afinidad”, dijo.

Una situación similar la vivió Carol Simbaña, una joven estudiante de medicina, quien formó parte de las brigadas médicas que atendieron a los heridos en la ‘zona cero’ de Quito. Cuenta que, al llegar a su casa luego de la jornada, fue muy criticada por un grupo de amigos. “Al menos yo no estaba a favor ni en contra de nadie. Fui al sitio a servir, y terminé fauleada”, expresó.

Diferencias

Es muy difícil llegar a un acuerdo entre dos partes cuando tienen un pensamiento o un punto de vista distinto, así lo comenta el coach Pablo Luzuriaga. Analiza que en este episodio de convulsión que atravesó el país, las discusiones se produjeron porque la gente quiso imponer su pensamiento a otras personas, “y el choque saltó a la vista cuando la contraparte no estuvo en consenso”.

La carga de información verídica y falsa que circuló en redes y plataformas de mensajería también causó conmoción, pues llegaba a confundir a las personas, e incluso a sembrar miedo, sobre todo en gente mayor. Por esto, “hubo quienes optaron por evitar enterarse de lo sucedido”, señaló Ana Jarrín, experta en el manejo de medios tecnológicos.

Posturas

Mucho tiene que ver también el tema por el que sale a flote la discusión. “No es lo mismo tener discrepancias por el fútbol que por temas de Derechos Humanos, o personas que traigan consigo un discurso de odio, clasista, racista y xenófobo”, afirma la sicóloga Gabriela Zamorano. “Una cosa es sentarte a discutir con un amigo (no pelear) con diferentes posturas ideológicas, y saber sobrellevar la conversación. Pero cuando se toman las redes como un espacio para irrespetarse, es diferente”, agrega. En ese sentido, Zamorano menciona que ese tipo de roces son los que marcan para que las amistades se rompan, o en el caso de las redes se dejen de ‘seguir’. (MLY)

Reconciliación

° El coach Pablo Luzuriaga afirma que usualmente, la gente espera de la otra parte para sanar heridas y reconciliarse. Pero recomienda que cada persona tome la iniciativa y subsane la brecha tras una ruptura.

Amistades ‘de años’ se perdieron, muchas veces por una confusión o malos entendidos. “Lo importante es aprender del error, y si en realidad te interesa conservar la amistad de la otra persona, hay que dejar el orgullo y actuar con madurez, con mayor razón si tu tuviste la culpa”, conlcuye.

Tras 12 días de convulsión también se han evidenciado amistades resquebrajadas.

Las redes sociales se convirtieron en un espacio de debate tras las últimas protestas protagonizadas en el país. En ocasiones, los usuarios, además de generar un debate, incluso llegaron a perder sus amistades, tras defender sus opiniones.

Es el caso de Alejandro Calero, de 29 años, quien tras un cruce de palabras con su vecino, rompió una amistad de años. “Él se puso muy grosero, hasta con mi familia. Casi nos vamos a los golpes. Me da pena porque algo que no nos afectaba ni a él ni a mí terminó con nuestra afinidad”, dijo.

Una situación similar la vivió Carol Simbaña, una joven estudiante de medicina, quien formó parte de las brigadas médicas que atendieron a los heridos en la ‘zona cero’ de Quito. Cuenta que, al llegar a su casa luego de la jornada, fue muy criticada por un grupo de amigos. “Al menos yo no estaba a favor ni en contra de nadie. Fui al sitio a servir, y terminé fauleada”, expresó.

Diferencias

Es muy difícil llegar a un acuerdo entre dos partes cuando tienen un pensamiento o un punto de vista distinto, así lo comenta el coach Pablo Luzuriaga. Analiza que en este episodio de convulsión que atravesó el país, las discusiones se produjeron porque la gente quiso imponer su pensamiento a otras personas, “y el choque saltó a la vista cuando la contraparte no estuvo en consenso”.

La carga de información verídica y falsa que circuló en redes y plataformas de mensajería también causó conmoción, pues llegaba a confundir a las personas, e incluso a sembrar miedo, sobre todo en gente mayor. Por esto, “hubo quienes optaron por evitar enterarse de lo sucedido”, señaló Ana Jarrín, experta en el manejo de medios tecnológicos.

Posturas

Mucho tiene que ver también el tema por el que sale a flote la discusión. “No es lo mismo tener discrepancias por el fútbol que por temas de Derechos Humanos, o personas que traigan consigo un discurso de odio, clasista, racista y xenófobo”, afirma la sicóloga Gabriela Zamorano. “Una cosa es sentarte a discutir con un amigo (no pelear) con diferentes posturas ideológicas, y saber sobrellevar la conversación. Pero cuando se toman las redes como un espacio para irrespetarse, es diferente”, agrega. En ese sentido, Zamorano menciona que ese tipo de roces son los que marcan para que las amistades se rompan, o en el caso de las redes se dejen de ‘seguir’. (MLY)

Reconciliación

° El coach Pablo Luzuriaga afirma que usualmente, la gente espera de la otra parte para sanar heridas y reconciliarse. Pero recomienda que cada persona tome la iniciativa y subsane la brecha tras una ruptura.

Amistades ‘de años’ se perdieron, muchas veces por una confusión o malos entendidos. “Lo importante es aprender del error, y si en realidad te interesa conservar la amistad de la otra persona, hay que dejar el orgullo y actuar con madurez, con mayor razón si tu tuviste la culpa”, conlcuye.

Tras 12 días de convulsión también se han evidenciado amistades resquebrajadas.

Las redes sociales se convirtieron en un espacio de debate tras las últimas protestas protagonizadas en el país. En ocasiones, los usuarios, además de generar un debate, incluso llegaron a perder sus amistades, tras defender sus opiniones.

Es el caso de Alejandro Calero, de 29 años, quien tras un cruce de palabras con su vecino, rompió una amistad de años. “Él se puso muy grosero, hasta con mi familia. Casi nos vamos a los golpes. Me da pena porque algo que no nos afectaba ni a él ni a mí terminó con nuestra afinidad”, dijo.

Una situación similar la vivió Carol Simbaña, una joven estudiante de medicina, quien formó parte de las brigadas médicas que atendieron a los heridos en la ‘zona cero’ de Quito. Cuenta que, al llegar a su casa luego de la jornada, fue muy criticada por un grupo de amigos. “Al menos yo no estaba a favor ni en contra de nadie. Fui al sitio a servir, y terminé fauleada”, expresó.

Diferencias

Es muy difícil llegar a un acuerdo entre dos partes cuando tienen un pensamiento o un punto de vista distinto, así lo comenta el coach Pablo Luzuriaga. Analiza que en este episodio de convulsión que atravesó el país, las discusiones se produjeron porque la gente quiso imponer su pensamiento a otras personas, “y el choque saltó a la vista cuando la contraparte no estuvo en consenso”.

La carga de información verídica y falsa que circuló en redes y plataformas de mensajería también causó conmoción, pues llegaba a confundir a las personas, e incluso a sembrar miedo, sobre todo en gente mayor. Por esto, “hubo quienes optaron por evitar enterarse de lo sucedido”, señaló Ana Jarrín, experta en el manejo de medios tecnológicos.

Posturas

Mucho tiene que ver también el tema por el que sale a flote la discusión. “No es lo mismo tener discrepancias por el fútbol que por temas de Derechos Humanos, o personas que traigan consigo un discurso de odio, clasista, racista y xenófobo”, afirma la sicóloga Gabriela Zamorano. “Una cosa es sentarte a discutir con un amigo (no pelear) con diferentes posturas ideológicas, y saber sobrellevar la conversación. Pero cuando se toman las redes como un espacio para irrespetarse, es diferente”, agrega. En ese sentido, Zamorano menciona que ese tipo de roces son los que marcan para que las amistades se rompan, o en el caso de las redes se dejen de ‘seguir’. (MLY)

Reconciliación

° El coach Pablo Luzuriaga afirma que usualmente, la gente espera de la otra parte para sanar heridas y reconciliarse. Pero recomienda que cada persona tome la iniciativa y subsane la brecha tras una ruptura.

Amistades ‘de años’ se perdieron, muchas veces por una confusión o malos entendidos. “Lo importante es aprender del error, y si en realidad te interesa conservar la amistad de la otra persona, hay que dejar el orgullo y actuar con madurez, con mayor razón si tu tuviste la culpa”, conlcuye.

Tras 12 días de convulsión también se han evidenciado amistades resquebrajadas.

Las redes sociales se convirtieron en un espacio de debate tras las últimas protestas protagonizadas en el país. En ocasiones, los usuarios, además de generar un debate, incluso llegaron a perder sus amistades, tras defender sus opiniones.

Es el caso de Alejandro Calero, de 29 años, quien tras un cruce de palabras con su vecino, rompió una amistad de años. “Él se puso muy grosero, hasta con mi familia. Casi nos vamos a los golpes. Me da pena porque algo que no nos afectaba ni a él ni a mí terminó con nuestra afinidad”, dijo.

Una situación similar la vivió Carol Simbaña, una joven estudiante de medicina, quien formó parte de las brigadas médicas que atendieron a los heridos en la ‘zona cero’ de Quito. Cuenta que, al llegar a su casa luego de la jornada, fue muy criticada por un grupo de amigos. “Al menos yo no estaba a favor ni en contra de nadie. Fui al sitio a servir, y terminé fauleada”, expresó.

Diferencias

Es muy difícil llegar a un acuerdo entre dos partes cuando tienen un pensamiento o un punto de vista distinto, así lo comenta el coach Pablo Luzuriaga. Analiza que en este episodio de convulsión que atravesó el país, las discusiones se produjeron porque la gente quiso imponer su pensamiento a otras personas, “y el choque saltó a la vista cuando la contraparte no estuvo en consenso”.

La carga de información verídica y falsa que circuló en redes y plataformas de mensajería también causó conmoción, pues llegaba a confundir a las personas, e incluso a sembrar miedo, sobre todo en gente mayor. Por esto, “hubo quienes optaron por evitar enterarse de lo sucedido”, señaló Ana Jarrín, experta en el manejo de medios tecnológicos.

Posturas

Mucho tiene que ver también el tema por el que sale a flote la discusión. “No es lo mismo tener discrepancias por el fútbol que por temas de Derechos Humanos, o personas que traigan consigo un discurso de odio, clasista, racista y xenófobo”, afirma la sicóloga Gabriela Zamorano. “Una cosa es sentarte a discutir con un amigo (no pelear) con diferentes posturas ideológicas, y saber sobrellevar la conversación. Pero cuando se toman las redes como un espacio para irrespetarse, es diferente”, agrega. En ese sentido, Zamorano menciona que ese tipo de roces son los que marcan para que las amistades se rompan, o en el caso de las redes se dejen de ‘seguir’. (MLY)

Reconciliación

° El coach Pablo Luzuriaga afirma que usualmente, la gente espera de la otra parte para sanar heridas y reconciliarse. Pero recomienda que cada persona tome la iniciativa y subsane la brecha tras una ruptura.

Amistades ‘de años’ se perdieron, muchas veces por una confusión o malos entendidos. “Lo importante es aprender del error, y si en realidad te interesa conservar la amistad de la otra persona, hay que dejar el orgullo y actuar con madurez, con mayor razón si tu tuviste la culpa”, conlcuye.