Vehículos ‘contraventores’ van a parar a la exestación del trole

Infraestructura. Hace 23 años en esta estación se inauguró la movilidad eléctrica. Hoy sirve como patio de retención vehicular.
Infraestructura. Hace 23 años en esta estación se inauguró la movilidad eléctrica. Hoy sirve como patio de retención vehicular.
Infraestructura. Hace 23 años en esta estación se inauguró la movilidad eléctrica. Hoy sirve como patio de retención vehicular.
Infraestructura. Hace 23 años en esta estación se inauguró la movilidad eléctrica. Hoy sirve como patio de retención vehicular.
Infraestructura. Hace 23 años en esta estación se inauguró la movilidad eléctrica. Hoy sirve como patio de retención vehicular.
Infraestructura. Hace 23 años en esta estación se inauguró la movilidad eléctrica. Hoy sirve como patio de retención vehicular.
Infraestructura. Hace 23 años en esta estación se inauguró la movilidad eléctrica. Hoy sirve como patio de retención vehicular.
Infraestructura. Hace 23 años en esta estación se inauguró la movilidad eléctrica. Hoy sirve como patio de retención vehicular.

Al menos 100 vehículos entre motocicletas, buses, automóviles y camionetas particulares permanecen detenidos al interior de la exestación norte del Trolebús, ubicada cerca al intercambiador de La Y y de la explaza de toros Jesús del Gran Poder.

Ese es el uso actual que la administración municipal de Jorge Yunda le da a esta infraestructura, que hasta julio anterior permaneció abandonada por completo por más de un año, tras 23 años y 8 meses de recibir a miles de pasajeros del Trolebús y sus “líneas alimentadoras”.

El Dato
El 31 de mayo de 2018 se cerró esta estación y se trasladó hacia El Labrador, junto con la “estación multimodal” del Metro.Así lo confirmaron responsables de este “patio de retención vehicular”, uno de los nueve que están bajo administración directa de la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT). En lo que eran los amplios carriles principales de salida de los trolebuses a la avenida 10 de agosto, por ejemplo, se mantienen estacionados dos buses urbanos con los que se prestaba el servicio de transporte público sin ningún tipo de autorización.

Una gran parte de lo que fueran “los andenes” de abordaje de pasajeros, permanece con pilas de cubiertas de los techos. En los exteriores, en cambio, la infraestructura no solo luce abandonada sino agredida con pintura o “grafitis” vandálicos”.

Los vecinos pensábamos que iba a ser una especie de comedor social para los obreros, trabajadores, comerciantes informales. No han vuelto a decir nada de esto”. Federico Oquedo Dueñas.
Semejante situación de olvido y falta de cuidado, contrasta con su aporte a la historia de la movilidad urbana. Este sitio fue testigo en 1996, con la presencia en ese entonces del alcalde Jamil Mahuad y del presidente Sixto Durán Ballén, de cómo la capital ecuatoriana estrenaba el primer transporte no solo eléctrico sino con carril exclusivo.

El futuro

El recuerdo de mejores tiempos ha dado paso a una incertidumbre sobre su uso futuro. Así lo testimonian vecinos y empleados de la zona, junto con pedidos a las autoridades de que una posible nueva planificación logre revertir no solo el abandono, sino la inseguridad que se ha generado en sus alrededores.

30.000
metros cuadrados tiene el predio.Según confirmaron concejales integrantes de la Comisión de Planificación del Concejo, esto dependerá de los resultados del proyecto de Corredor Urbano Metropolitano, que a su vez se relaciona con el concurso de diseño en el que participan 45 equipos de cuatro países integrados por 573 profesionales de distintas áreas.

Para diciembre próximo se prevé que un jurado de siete integrantes de instituciones públicas y privadas califique las iniciativas no solo para definir el futuro de esta exestación sino para “urbanizar el metro y sus 15 estaciones” con más viviendas, servicios y transporte público a lo largo de 53 kilómetros en torno a las avenidas Galo Plaza y 10 de Agosto, en el norte; Pichincha, en el centro; y Maldonado, en el sur. (JCER)

Por lo que quedó abandonada la estación ha provocado inseguridad. Es necesario que planifiquen un buen uso, que aporte vida a la zona”. Rebeca Coello
Fudamento del desarrollo
urbano

El catedrático de Teoría Urbana de la Universidad Católica, Hernán Orbea, calificó como “fundamental para el desarrollo urbano” de la ciudad, el proyecto de diseño del mencionado corredor urbano. Destacó, por ejemplo, la posibilidad que la gente acceda desde las estaciones no solo a distintos modos de transporte sino a nuevos servicios.

Agregó que existe una oportunidad única en la historia urbana del norte de Quito de aprovechar para vivienda social una zona extensa, de seis hectáreas en las que necesariamente debería incluirse un parque y servicios que la conviertan en “una centralidad”.

“Con ejercicios de diseño, que enfrenten con madurez el problema de la equiparación de oportunidades, se debería dar un porcentaje importante de vivienda social, que pienso, para rentabilizar los predios debería estar en el 30%”, opinó.

Al menos 100 vehículos entre motocicletas, buses, automóviles y camionetas particulares permanecen detenidos al interior de la exestación norte del Trolebús, ubicada cerca al intercambiador de La Y y de la explaza de toros Jesús del Gran Poder.

Ese es el uso actual que la administración municipal de Jorge Yunda le da a esta infraestructura, que hasta julio anterior permaneció abandonada por completo por más de un año, tras 23 años y 8 meses de recibir a miles de pasajeros del Trolebús y sus “líneas alimentadoras”.

El Dato
El 31 de mayo de 2018 se cerró esta estación y se trasladó hacia El Labrador, junto con la “estación multimodal” del Metro.Así lo confirmaron responsables de este “patio de retención vehicular”, uno de los nueve que están bajo administración directa de la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT). En lo que eran los amplios carriles principales de salida de los trolebuses a la avenida 10 de agosto, por ejemplo, se mantienen estacionados dos buses urbanos con los que se prestaba el servicio de transporte público sin ningún tipo de autorización.

Una gran parte de lo que fueran “los andenes” de abordaje de pasajeros, permanece con pilas de cubiertas de los techos. En los exteriores, en cambio, la infraestructura no solo luce abandonada sino agredida con pintura o “grafitis” vandálicos”.

Los vecinos pensábamos que iba a ser una especie de comedor social para los obreros, trabajadores, comerciantes informales. No han vuelto a decir nada de esto”. Federico Oquedo Dueñas.
Semejante situación de olvido y falta de cuidado, contrasta con su aporte a la historia de la movilidad urbana. Este sitio fue testigo en 1996, con la presencia en ese entonces del alcalde Jamil Mahuad y del presidente Sixto Durán Ballén, de cómo la capital ecuatoriana estrenaba el primer transporte no solo eléctrico sino con carril exclusivo.

El futuro

El recuerdo de mejores tiempos ha dado paso a una incertidumbre sobre su uso futuro. Así lo testimonian vecinos y empleados de la zona, junto con pedidos a las autoridades de que una posible nueva planificación logre revertir no solo el abandono, sino la inseguridad que se ha generado en sus alrededores.

30.000
metros cuadrados tiene el predio.Según confirmaron concejales integrantes de la Comisión de Planificación del Concejo, esto dependerá de los resultados del proyecto de Corredor Urbano Metropolitano, que a su vez se relaciona con el concurso de diseño en el que participan 45 equipos de cuatro países integrados por 573 profesionales de distintas áreas.

Para diciembre próximo se prevé que un jurado de siete integrantes de instituciones públicas y privadas califique las iniciativas no solo para definir el futuro de esta exestación sino para “urbanizar el metro y sus 15 estaciones” con más viviendas, servicios y transporte público a lo largo de 53 kilómetros en torno a las avenidas Galo Plaza y 10 de Agosto, en el norte; Pichincha, en el centro; y Maldonado, en el sur. (JCER)

Por lo que quedó abandonada la estación ha provocado inseguridad. Es necesario que planifiquen un buen uso, que aporte vida a la zona”. Rebeca Coello
Fudamento del desarrollo
urbano

El catedrático de Teoría Urbana de la Universidad Católica, Hernán Orbea, calificó como “fundamental para el desarrollo urbano” de la ciudad, el proyecto de diseño del mencionado corredor urbano. Destacó, por ejemplo, la posibilidad que la gente acceda desde las estaciones no solo a distintos modos de transporte sino a nuevos servicios.

Agregó que existe una oportunidad única en la historia urbana del norte de Quito de aprovechar para vivienda social una zona extensa, de seis hectáreas en las que necesariamente debería incluirse un parque y servicios que la conviertan en “una centralidad”.

“Con ejercicios de diseño, que enfrenten con madurez el problema de la equiparación de oportunidades, se debería dar un porcentaje importante de vivienda social, que pienso, para rentabilizar los predios debería estar en el 30%”, opinó.

Al menos 100 vehículos entre motocicletas, buses, automóviles y camionetas particulares permanecen detenidos al interior de la exestación norte del Trolebús, ubicada cerca al intercambiador de La Y y de la explaza de toros Jesús del Gran Poder.

Ese es el uso actual que la administración municipal de Jorge Yunda le da a esta infraestructura, que hasta julio anterior permaneció abandonada por completo por más de un año, tras 23 años y 8 meses de recibir a miles de pasajeros del Trolebús y sus “líneas alimentadoras”.

El Dato
El 31 de mayo de 2018 se cerró esta estación y se trasladó hacia El Labrador, junto con la “estación multimodal” del Metro.Así lo confirmaron responsables de este “patio de retención vehicular”, uno de los nueve que están bajo administración directa de la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT). En lo que eran los amplios carriles principales de salida de los trolebuses a la avenida 10 de agosto, por ejemplo, se mantienen estacionados dos buses urbanos con los que se prestaba el servicio de transporte público sin ningún tipo de autorización.

Una gran parte de lo que fueran “los andenes” de abordaje de pasajeros, permanece con pilas de cubiertas de los techos. En los exteriores, en cambio, la infraestructura no solo luce abandonada sino agredida con pintura o “grafitis” vandálicos”.

Los vecinos pensábamos que iba a ser una especie de comedor social para los obreros, trabajadores, comerciantes informales. No han vuelto a decir nada de esto”. Federico Oquedo Dueñas.
Semejante situación de olvido y falta de cuidado, contrasta con su aporte a la historia de la movilidad urbana. Este sitio fue testigo en 1996, con la presencia en ese entonces del alcalde Jamil Mahuad y del presidente Sixto Durán Ballén, de cómo la capital ecuatoriana estrenaba el primer transporte no solo eléctrico sino con carril exclusivo.

El futuro

El recuerdo de mejores tiempos ha dado paso a una incertidumbre sobre su uso futuro. Así lo testimonian vecinos y empleados de la zona, junto con pedidos a las autoridades de que una posible nueva planificación logre revertir no solo el abandono, sino la inseguridad que se ha generado en sus alrededores.

30.000
metros cuadrados tiene el predio.Según confirmaron concejales integrantes de la Comisión de Planificación del Concejo, esto dependerá de los resultados del proyecto de Corredor Urbano Metropolitano, que a su vez se relaciona con el concurso de diseño en el que participan 45 equipos de cuatro países integrados por 573 profesionales de distintas áreas.

Para diciembre próximo se prevé que un jurado de siete integrantes de instituciones públicas y privadas califique las iniciativas no solo para definir el futuro de esta exestación sino para “urbanizar el metro y sus 15 estaciones” con más viviendas, servicios y transporte público a lo largo de 53 kilómetros en torno a las avenidas Galo Plaza y 10 de Agosto, en el norte; Pichincha, en el centro; y Maldonado, en el sur. (JCER)

Por lo que quedó abandonada la estación ha provocado inseguridad. Es necesario que planifiquen un buen uso, que aporte vida a la zona”. Rebeca Coello
Fudamento del desarrollo
urbano

El catedrático de Teoría Urbana de la Universidad Católica, Hernán Orbea, calificó como “fundamental para el desarrollo urbano” de la ciudad, el proyecto de diseño del mencionado corredor urbano. Destacó, por ejemplo, la posibilidad que la gente acceda desde las estaciones no solo a distintos modos de transporte sino a nuevos servicios.

Agregó que existe una oportunidad única en la historia urbana del norte de Quito de aprovechar para vivienda social una zona extensa, de seis hectáreas en las que necesariamente debería incluirse un parque y servicios que la conviertan en “una centralidad”.

“Con ejercicios de diseño, que enfrenten con madurez el problema de la equiparación de oportunidades, se debería dar un porcentaje importante de vivienda social, que pienso, para rentabilizar los predios debería estar en el 30%”, opinó.

Al menos 100 vehículos entre motocicletas, buses, automóviles y camionetas particulares permanecen detenidos al interior de la exestación norte del Trolebús, ubicada cerca al intercambiador de La Y y de la explaza de toros Jesús del Gran Poder.

Ese es el uso actual que la administración municipal de Jorge Yunda le da a esta infraestructura, que hasta julio anterior permaneció abandonada por completo por más de un año, tras 23 años y 8 meses de recibir a miles de pasajeros del Trolebús y sus “líneas alimentadoras”.

El Dato
El 31 de mayo de 2018 se cerró esta estación y se trasladó hacia El Labrador, junto con la “estación multimodal” del Metro.Así lo confirmaron responsables de este “patio de retención vehicular”, uno de los nueve que están bajo administración directa de la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT). En lo que eran los amplios carriles principales de salida de los trolebuses a la avenida 10 de agosto, por ejemplo, se mantienen estacionados dos buses urbanos con los que se prestaba el servicio de transporte público sin ningún tipo de autorización.

Una gran parte de lo que fueran “los andenes” de abordaje de pasajeros, permanece con pilas de cubiertas de los techos. En los exteriores, en cambio, la infraestructura no solo luce abandonada sino agredida con pintura o “grafitis” vandálicos”.

Los vecinos pensábamos que iba a ser una especie de comedor social para los obreros, trabajadores, comerciantes informales. No han vuelto a decir nada de esto”. Federico Oquedo Dueñas.
Semejante situación de olvido y falta de cuidado, contrasta con su aporte a la historia de la movilidad urbana. Este sitio fue testigo en 1996, con la presencia en ese entonces del alcalde Jamil Mahuad y del presidente Sixto Durán Ballén, de cómo la capital ecuatoriana estrenaba el primer transporte no solo eléctrico sino con carril exclusivo.

El futuro

El recuerdo de mejores tiempos ha dado paso a una incertidumbre sobre su uso futuro. Así lo testimonian vecinos y empleados de la zona, junto con pedidos a las autoridades de que una posible nueva planificación logre revertir no solo el abandono, sino la inseguridad que se ha generado en sus alrededores.

30.000
metros cuadrados tiene el predio.Según confirmaron concejales integrantes de la Comisión de Planificación del Concejo, esto dependerá de los resultados del proyecto de Corredor Urbano Metropolitano, que a su vez se relaciona con el concurso de diseño en el que participan 45 equipos de cuatro países integrados por 573 profesionales de distintas áreas.

Para diciembre próximo se prevé que un jurado de siete integrantes de instituciones públicas y privadas califique las iniciativas no solo para definir el futuro de esta exestación sino para “urbanizar el metro y sus 15 estaciones” con más viviendas, servicios y transporte público a lo largo de 53 kilómetros en torno a las avenidas Galo Plaza y 10 de Agosto, en el norte; Pichincha, en el centro; y Maldonado, en el sur. (JCER)

Por lo que quedó abandonada la estación ha provocado inseguridad. Es necesario que planifiquen un buen uso, que aporte vida a la zona”. Rebeca Coello
Fudamento del desarrollo
urbano

El catedrático de Teoría Urbana de la Universidad Católica, Hernán Orbea, calificó como “fundamental para el desarrollo urbano” de la ciudad, el proyecto de diseño del mencionado corredor urbano. Destacó, por ejemplo, la posibilidad que la gente acceda desde las estaciones no solo a distintos modos de transporte sino a nuevos servicios.

Agregó que existe una oportunidad única en la historia urbana del norte de Quito de aprovechar para vivienda social una zona extensa, de seis hectáreas en las que necesariamente debería incluirse un parque y servicios que la conviertan en “una centralidad”.

“Con ejercicios de diseño, que enfrenten con madurez el problema de la equiparación de oportunidades, se debería dar un porcentaje importante de vivienda social, que pienso, para rentabilizar los predios debería estar en el 30%”, opinó.