Videojuegos ayudan a niños con discapacidad

INNOVACIÓN. Las herramientas tecnológicas fueron diseñadas por profesores de la Escuela Politécnica Nacional.
INNOVACIÓN. Las herramientas tecnológicas fueron diseñadas por profesores de la Escuela Politécnica Nacional.
INNOVACIÓN. Las herramientas tecnológicas fueron diseñadas por profesores de la Escuela Politécnica Nacional.
INNOVACIÓN. Las herramientas tecnológicas fueron diseñadas por profesores de la Escuela Politécnica Nacional.
INNOVACIÓN. Las herramientas tecnológicas fueron diseñadas por profesores de la Escuela Politécnica Nacional.
INNOVACIÓN. Las herramientas tecnológicas fueron diseñadas por profesores de la Escuela Politécnica Nacional.
INNOVACIÓN. Las herramientas tecnológicas fueron diseñadas por profesores de la Escuela Politécnica Nacional.
INNOVACIÓN. Las herramientas tecnológicas fueron diseñadas por profesores de la Escuela Politécnica Nacional.

Un casco y unas gafas les permite ingresar en otro mundo. Una playa, un bosque o París llegan hasta la comodidad de la sala de estudio de la Fundación para la Integración del Niño Especial (FINE); un espacio que trabaja con pequeños con diferentes tipos de discapacidad para lograr una inserción social adecuada.

Estos paisajes de ensueño, a los que en ocasiones, los niños por sus discapacidades, no pueden viajar, les permite relajar. Entrar en una terapia sensorial solo requiere un teléfono, una aplicación y equipos de inducción a la realidad virtual.

Este es uno de los productos que desarrolló la Escuela Politécnica Nacional (EPN) para contribuir con la fundación, a través de videojuegos, explicó Marcos Santorum, docente investigador de la EPN.

Hace dos años, Santorum emprendió una investigación sobre el mundo de los videojuegos para encajarlos con el aprendizaje y la educación de niños y jóvenes. Él y una compañera crearon una metodología que permite desarrollar videojuegos educativos o ‘videojuegos serios’.

La metodología, conocida como I+, podría aportar a otros profesionales a que persigan el mismo objetivo. Además, es la primera que se ha desarrollado en el país y que consta en publicaciones científicas.

“La creación de la metodología de creación de videojuegos, si bien fue lo más importante, fue solo el primer paso”, manifestó.

Proyectos
El videojuego fue diseñado después de asimilar procesos terapéuticos, como armar rompecabezas o actividades más elaboradas, para desarrollarlas digitalmente.

EL DATO
La EPN trabaja en el desarrollo de videojuegos basados en esta metodología con nuevos proyectos cada dos semestres.“El escenario de realidad virtual que creamos sirve para la relajación de los niños. A veces, por su discapacidad pueden ser agresivos; esto los calma”, contó Santorum.

Un segundo proyecto enseña a los miembros de la fundación a elaborar pan. Para los niños y jóvenes de la fundación, “en ocasiones no es fácil acordarse de qué implementos sirven para qué o cómo manipularlos”, dijo.

Por eso, crearon una aplicación que les permite relacionarse con el espacio de trabajo previamente y memorizar tareas como “lavarse las manos, prender el horno y otras actividades”. Así, esos productos han permitido comprobar que la metodología sirve para la enseñanza. (ECV)

Un casco y unas gafas les permite ingresar en otro mundo. Una playa, un bosque o París llegan hasta la comodidad de la sala de estudio de la Fundación para la Integración del Niño Especial (FINE); un espacio que trabaja con pequeños con diferentes tipos de discapacidad para lograr una inserción social adecuada.

Estos paisajes de ensueño, a los que en ocasiones, los niños por sus discapacidades, no pueden viajar, les permite relajar. Entrar en una terapia sensorial solo requiere un teléfono, una aplicación y equipos de inducción a la realidad virtual.

Este es uno de los productos que desarrolló la Escuela Politécnica Nacional (EPN) para contribuir con la fundación, a través de videojuegos, explicó Marcos Santorum, docente investigador de la EPN.

Hace dos años, Santorum emprendió una investigación sobre el mundo de los videojuegos para encajarlos con el aprendizaje y la educación de niños y jóvenes. Él y una compañera crearon una metodología que permite desarrollar videojuegos educativos o ‘videojuegos serios’.

La metodología, conocida como I+, podría aportar a otros profesionales a que persigan el mismo objetivo. Además, es la primera que se ha desarrollado en el país y que consta en publicaciones científicas.

“La creación de la metodología de creación de videojuegos, si bien fue lo más importante, fue solo el primer paso”, manifestó.

Proyectos
El videojuego fue diseñado después de asimilar procesos terapéuticos, como armar rompecabezas o actividades más elaboradas, para desarrollarlas digitalmente.

EL DATO
La EPN trabaja en el desarrollo de videojuegos basados en esta metodología con nuevos proyectos cada dos semestres.“El escenario de realidad virtual que creamos sirve para la relajación de los niños. A veces, por su discapacidad pueden ser agresivos; esto los calma”, contó Santorum.

Un segundo proyecto enseña a los miembros de la fundación a elaborar pan. Para los niños y jóvenes de la fundación, “en ocasiones no es fácil acordarse de qué implementos sirven para qué o cómo manipularlos”, dijo.

Por eso, crearon una aplicación que les permite relacionarse con el espacio de trabajo previamente y memorizar tareas como “lavarse las manos, prender el horno y otras actividades”. Así, esos productos han permitido comprobar que la metodología sirve para la enseñanza. (ECV)

Un casco y unas gafas les permite ingresar en otro mundo. Una playa, un bosque o París llegan hasta la comodidad de la sala de estudio de la Fundación para la Integración del Niño Especial (FINE); un espacio que trabaja con pequeños con diferentes tipos de discapacidad para lograr una inserción social adecuada.

Estos paisajes de ensueño, a los que en ocasiones, los niños por sus discapacidades, no pueden viajar, les permite relajar. Entrar en una terapia sensorial solo requiere un teléfono, una aplicación y equipos de inducción a la realidad virtual.

Este es uno de los productos que desarrolló la Escuela Politécnica Nacional (EPN) para contribuir con la fundación, a través de videojuegos, explicó Marcos Santorum, docente investigador de la EPN.

Hace dos años, Santorum emprendió una investigación sobre el mundo de los videojuegos para encajarlos con el aprendizaje y la educación de niños y jóvenes. Él y una compañera crearon una metodología que permite desarrollar videojuegos educativos o ‘videojuegos serios’.

La metodología, conocida como I+, podría aportar a otros profesionales a que persigan el mismo objetivo. Además, es la primera que se ha desarrollado en el país y que consta en publicaciones científicas.

“La creación de la metodología de creación de videojuegos, si bien fue lo más importante, fue solo el primer paso”, manifestó.

Proyectos
El videojuego fue diseñado después de asimilar procesos terapéuticos, como armar rompecabezas o actividades más elaboradas, para desarrollarlas digitalmente.

EL DATO
La EPN trabaja en el desarrollo de videojuegos basados en esta metodología con nuevos proyectos cada dos semestres.“El escenario de realidad virtual que creamos sirve para la relajación de los niños. A veces, por su discapacidad pueden ser agresivos; esto los calma”, contó Santorum.

Un segundo proyecto enseña a los miembros de la fundación a elaborar pan. Para los niños y jóvenes de la fundación, “en ocasiones no es fácil acordarse de qué implementos sirven para qué o cómo manipularlos”, dijo.

Por eso, crearon una aplicación que les permite relacionarse con el espacio de trabajo previamente y memorizar tareas como “lavarse las manos, prender el horno y otras actividades”. Así, esos productos han permitido comprobar que la metodología sirve para la enseñanza. (ECV)

Un casco y unas gafas les permite ingresar en otro mundo. Una playa, un bosque o París llegan hasta la comodidad de la sala de estudio de la Fundación para la Integración del Niño Especial (FINE); un espacio que trabaja con pequeños con diferentes tipos de discapacidad para lograr una inserción social adecuada.

Estos paisajes de ensueño, a los que en ocasiones, los niños por sus discapacidades, no pueden viajar, les permite relajar. Entrar en una terapia sensorial solo requiere un teléfono, una aplicación y equipos de inducción a la realidad virtual.

Este es uno de los productos que desarrolló la Escuela Politécnica Nacional (EPN) para contribuir con la fundación, a través de videojuegos, explicó Marcos Santorum, docente investigador de la EPN.

Hace dos años, Santorum emprendió una investigación sobre el mundo de los videojuegos para encajarlos con el aprendizaje y la educación de niños y jóvenes. Él y una compañera crearon una metodología que permite desarrollar videojuegos educativos o ‘videojuegos serios’.

La metodología, conocida como I+, podría aportar a otros profesionales a que persigan el mismo objetivo. Además, es la primera que se ha desarrollado en el país y que consta en publicaciones científicas.

“La creación de la metodología de creación de videojuegos, si bien fue lo más importante, fue solo el primer paso”, manifestó.

Proyectos
El videojuego fue diseñado después de asimilar procesos terapéuticos, como armar rompecabezas o actividades más elaboradas, para desarrollarlas digitalmente.

EL DATO
La EPN trabaja en el desarrollo de videojuegos basados en esta metodología con nuevos proyectos cada dos semestres.“El escenario de realidad virtual que creamos sirve para la relajación de los niños. A veces, por su discapacidad pueden ser agresivos; esto los calma”, contó Santorum.

Un segundo proyecto enseña a los miembros de la fundación a elaborar pan. Para los niños y jóvenes de la fundación, “en ocasiones no es fácil acordarse de qué implementos sirven para qué o cómo manipularlos”, dijo.

Por eso, crearon una aplicación que les permite relacionarse con el espacio de trabajo previamente y memorizar tareas como “lavarse las manos, prender el horno y otras actividades”. Así, esos productos han permitido comprobar que la metodología sirve para la enseñanza. (ECV)