Con menos hospitalizaciones, se mantienen los contagios

Con menos hospitalizaciones, el índice de positividad aún es superior al que recomienda la OMS.

Los contagios de Covid-19 siguen en ascenso en Quito.

Según Ximena Abarca, secretaria de Salud de la capital, el incremento de casos se debe a que hay mayor número de toma de muestras para identificar a los infectados.

Sin embargo, el índice de positividad de la capital sigue siendo superior al 10%, que es lo que recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS). Sólo llegando a ese índice, se alcanzaría el ‘control’ de la emergencia.

Las últimas cuatro semanas, los casos nuevos en la capital han ido en aumento señaló Abarca, que ha reconocido que las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) siguen a tope y que, aunque las hospitalizaciones han disminuido, eso no implica que también los contagios.

Hay menos hospitalización

Las últimas cuatro semanas, las atenciones en los hospitales del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) bajaron un 19%, de 2.857 atenciones (del 10 al 16 de agosto) a 2.316 en la semana del 14 al 21 de septiembre.

Buscar atención a la primera sospecha de síntomas permite la detección temprana, lo que mejora las posibilidades de recuperarse en casa y evitar la hospitalización. Mientras que en el centro temporal ‘Quito Solidario’, los primeros días de agosto había un promedio de 73 pacientes por semana, en septiembre bajaron a 21.

El presidente del IESS, Jorge Wated, indicó que la reducción de pacientes que solicitan consulta por síntomas asociados a Covid-19 también bajó desde mediados de agosto.

Detección temprana

¿Cómo se explica entonces que haya más contagios pero menos hospitalizaciones? Sara Andrade, especialista en salud pública, explica que una de las claves es la detección temprana.

“Con las brigadas comunitarias es más fácil encontrar pacientes antes de que lleguen al hospital por emergencia. Muchos no tienen para hacerse una prueba de Covid y esperaban hasta llegar ya muy mal al hospital”, comenta Andrade.

La situación representa una moneda de dos caras. La disminución de ocupación hospitalaria permitirá abrir áreas para pacientes con otras patologías; sin embargo, agrega Andrade, al decir que hay menos hospitalizaciones la comunidad puede creer que ya pasó lo peor “y no, en esta fase hay que estar más alerta”.

El riesgo sigue latente y no es igual en todas partes

Aunque muchos países, incluyendo Ecuador, han empezado a reactivarse; la pandemia no ha terminado.

“Puede pasar que por creer que hemos aprendido a convivir con el virus, se pierda la estricta bioseguridad que se tenía cuando poco se conocía del virus”, advierte Sara Andrade, especialista en salud pública.

Por eso señala que es indispensable identificar el tipo de espacio en el que estamos para dependiendo de eso saber cuánto tiempo es posible permanecer allí (ver recuadro). En los lugares de mayor riesgo no es recomendable estar más de una hora, aunque es mejor evitar aquellos lugares donde no se puede mantener una distancia de dos metros.

Actualmente las reuniones sociales ya no están prohibidas pero se recomienda evitar el contacto (saludar con beso, con la mano o abrazar). También se debe evitar compartir cualquier tipo de artículo. “Recordemos que los pacientes asintomáticos tienen alta carga viral”, agrega la experta.

Al reactivarse la movilidad el uso de transporte público va en aumento y éste es considerado el segundo mayor espacio de infección, por lo que se recomienda la aplicación de gel o alcohol antes de subir.

También, evitar en lo posible tocar los pasamanos, no sacar el celular u otros objetos durante el trayecto pero, si lo hace, desinfectarlos antes de guardarlos y colocarse nuevamente alcohol al bajar del bus. (AVV)