Piden agilidad en presunto caso de violación dentro de comuna tsáchila

Solidarios. Desde diferentes organizaciones, apoyan a Fernando A, y piden agilidad de la justicia ordinaria.
Solidarios. Desde diferentes organizaciones, apoyan a Fernando A, y piden agilidad de la justicia ordinaria.

Casi cuatro meses han pasado desde que Fernando A, tuvo que escuchar los gritos desgarradores de su pequeña hija de 4 años de edad, quien presuntamente fue violada por un vecino, de 12 años de edad.

Caso

Fernando salió a trabajar en la agricultura con su esposa, como siempre. En casa quedaron sus tres hijos, el uno de 11, otro de 9 y la pequeña de 4 años de edad. Cuando llegaron con su esposa, la niña gritaba y él alcanzó a gritar y su vecino de 12 años de edad salió corriendo del patio donde estaban, según cuenta con indignación Fernando.

Perplejos por lo ocurrido y viendo sangrar a la pequeña solo pudieron abrazarla y recostarla en la cama. Luego, la llevaron a un centro de salud. Empezó el proceso legal, pero ya son cuatro meses y dicen que no ven avances, mientras la pequeña se ha convertido en otra después de la presunta violación anal; llora, grita y es aislada según versiones de sus padres.

EL DATO:
El hecho habría ocurrido, el pasado 16 de agosto en una comuna Tsáchila.Apoyo

La mañana de ayer se realizó una rueda de prensa en la que estuvo presente también el presidente de la Confederación de Nacionalidades y Pueblos Indígenas de la Costa Ecuatoriana (Conaice), Edison Aguavil, quien lamentó “la lentitud con la que se está llevando el caso” en la justicia ordinaria, puesto que este tipo de delitos no pueden ser juzgados por la justicia indígena, con los estatutos de la nacionalidad Tsáchila.

Nelly Laaz, delegada de la Defensoría Comunitaria desde donde se realiza seguimiento y vigilancia sobre la violencia a niños, niñas y adolescentes, pide que se cumpla la ley y se pague la causa por parte del adolescente y piden también agilidad. Se tiene prevista para hoy otra audiencia y Fernando pide a las autoridades que lo ayuden porque le da mucha pena como ha venido avanzando el proceso, ante esta situación que deja marcada la vida de su pequeña. (VG)

Lejos

Fernando, junto a su esposa y sus tres hijos viven en una comuna tsáchila. Son más de 30 kilómetros de distancia. Ellos se dedican a la agricultura y manifiestan que es difícil estar en el trámite que se ha demorado, que se les complica salir todos los días y no cuentan con los recursos necesarios, sin embargo han recibido la ayuda del Consejo Cantonal para la Protección de Derechos.