El MAG

EDUARDO CHIRIBOGA APONTE

Con la renuncia de Rubén Flores a la Cartera de agricultura, hombre conocedor del agro, quedaron flotando las mismas dudas de siempre, pues los grupos que lo increparon, vienen teniendo los mismos problemas de comercialización desde hace décadas, y son manejados por grupos que defienden sus intereses, antes que los de todo su sector. De seguro fue el factor de cálculo político lo que primó en su separación.

Pero lo que llama la atención, es la demora en elegir a su reemplazo. Es más, ni los medios de comunicación más importantes a nivel nacional, trataban el tema. Parecía que tal designación poco importaba. Y cuando fue anunciado el nombre de la nueva titular del MAG, la interrogante fue sobre su desconocida trayectoria. Es decir, ni la primera, ni la fugaz tercera titular de esta crucial Cartera, fueron lo que el sector agropecuario esperaba.

Sin duda, esto muestra a las claras, que dado que nuestro agro carece ex profesamente de políticas de Estado en la real vocación de nuestra patria, lo que tradicionalmente le ha acolitado el juego a los grupos que manejan de manera oligopólica prácticamente a todos los sectores y a sus cadenas productivas, la designación de su Ministro y Subsecretarios, por lo general, proviene de nombres que han sido aceptados o propuestos, por estas grandes empresas, a las que le tiene sin cuidado el nivel de vida y el desarrollo socioeconómico del campesinado.

Es por esto que se debe insistir en un cambio de óptica en tan vital actividad. La tan cacareada asociatividad, torpedeada desde siempre por los grandes grupos, su reforzamiento, financiamiento, capacitación y seguimiento, es LA tarea a seguir, pues el sector agropecuario ES el futuro de la patria. La noble tarea de una banca de desarrollo bien manejada, es vital en este cometido.

Si no se consensuan y se analiza esta postura, los comerciantes sin control y el contrabando, harán de tan promisorio devenir, una utopía, y acabarán convirtiéndonos en otro Panamá, donde el comercio es prácticamente la única actividad, u en otra Venezuela, donde su agro ha desaparecido.

Hago votos para que Moreno entienda que es imperioso darle la vital importancia que tiene y que se merece el sector agropecuario nacional.

eduardochiribogapuntoverde@hotmail.com