Steven Molina casi no recuerda nada de lo que fue su vida en Valledupar, Colombia, donde nació hace 17 años. Siendo muy pequeñito su padre colombiano y su madre manabita lo trajeron a Ecuador y desde entonces reside en Santo Domingo de los Tsáchilas.
Confiesa que disfruta muchísimo de la música de su país natal y que las costumbres son muy similares. “Me siento ecuatoriano, es mi segundo país”, expresó el joven, que estudia en la unidad educativa Julio Moreno Espinosa.
Lina Gómez tiene una historia parecida. Ella nació en Cali, Colombia, donde residió los primeros cinco años de su vida. Luego sus padres la trajeron a Ecuador y hoy es una de las cinco estudiantes de otros países que cursa sus estudios en la unidad educativa Kasama.
Ellos fueron dos de los 35 estudiantes de la provincia que participaron de los talleres denominado Reconociéndonos en nuestras raíces, iniciativa impulsada por el Ministerio de Relaciones Exteriores y de Movilidad Humana, que tuvo un plan piloto en Manabí y decidió extender la iniciativa a Santo Domingo, tomando en cuenta la diversidad de la población del territorio tsáchila.
Reencuentro
Durante las exposiciones, que iniciaron el lunes y concluyeron ayer, se escucharon emotivos relatos y canciones, que a muchos de los presentes arrancaron lágrimas y recuerdos, de los que más duelen y traen añoranzas.
Al respecto, el docente Sergio Guingla mencionó que es importante vincular a estos chicos con la cultura ecuatoriana, para que conozcan la identidad local y se sientan más parte del territorio nacional.
Reconociéndonos en nuestras raíces se ha planificado para estudiantes migrantes, o hijos de migrantes retornados, que nacieron en otros países y ahora residen en Ecuador.
Según dijo María Soledad Vela, coordinadora del Ministerio de Relaciones Exteriores en la zona 4 de Santo Domingo y Manabí, “se pensó que los adolescentes puedan reconocerse en la identidad nacional, porque siempre han estado en otro país y muchas veces se sienten también de otros lugares. El objetivo es que puedan insertarse a la educación y a la cultura nacional”.
En la provincia la mayor cantidad de estudiantes migrantes está en las unidades educativas Kasama y Julio Moreno Espinosa. (ARR)
EL DATO
Estudiantes extranjeros de Colombia, Cuba, España y Venezuela y participaron de los talleres.
Desarrollo
Los jóvenes participaron de diferentes dinámicas, cuya temática era la migración y los sentimientos que se experimentan al abandonar un país y llegar a otro, completamente desconocido. También hubo visitas a las comunas Tsáchilas y se planificó, asimismo, un recorrido en el cantón La Concordia.
“Me siento como en casa, Ecuador es mi segundo hogar y he aprendido a convivir con una cultura diferente”.
Lina Gómez,
Estudiante
“Me gustaría mucho regresar a Colombia y contarles a mis familiares cómo es Ecuador, me siento como un ecuatoriano más”.
Steven Molina
“Es importante vincular a estos chicos con las tradiciones locales y nacionales, para que también se sientan insertados en la sociedad”.
Sergio Guingla,
Docente