Movilidad sostenible

Verónica Narváez

En contexto de planificación urbana, el término movilidad reemplaza con mayor frecuencia al término transporte. La movilidad integra el concepto de sostenibilidad, es decir la movilidad va a la par de la recuperación de espacios públicos como lugares de encuentro. Es decir, toma en cuenta a la comunidad y el entorno como el eje principal de desplazamiento.

Así, se considera la bicicleta y la caminata como los principales medios de desplazamiento cotidiano, de modo que cada vez son las ciudades del mundo que incorporan políticas encaminadas a la recuperación de espacios públicos para peatonización y el uso de bicicleta principalmente. La planificación sostenible es planificación pensada en las personas.

La pirámide de movilidad sostenible, establece el orden de prioridad considerando al peatón -caminata como la mejor opción de movilidad en distancias cortas, sigue el ciclista (bici muy eficiente en distancias cortas, no contamina, no genera ruido y es saludable), el transporte público (más viable y económico), los transportes de carga y los vehículos particulares (contaminantes y baja eficiencia).

Los beneficios de establecer la movilidad sostenible como una política pública, nos permitiría incentivar el uso de la bicicleta especialmente a los jóvenes, pero debe ser acompañada con medidas que nos permita garantizar las características y seguridades necesarias en las ciclovías, a la par se deben realizar campañas de sensibilización enfocadas al respeto a los usuarios de las ciclovías, agentes de tránsito, ventajas del uso de la bicicleta y la caminata para combatir el sedentarismo, normativa vinculante a infracciones y sanciones. Todo el esquema se puede establecer en ordenanza cantonal.

Es un gran reto, pero indispensable para las ciudades que buscan modernizarse planteando mecanismos de transporte más seguros, económicos, eficientes y ambientalmente amigables y que en efecto generan mayor consumo local y emprendimientos.

[email protected]