Dedicar el mayor tiempo a sus dos hijos y educarlos de manera correcta es el principal reto de vida para Geovanny Borja Paredes, de 46 años, quien se ha visto obligado a sortear las barreras que el destino le ha puesto para brindar tranquilidad; pero sobre todo felicidad a los integrantes de su familia.
Se dedica a la producción de teatro y cine, ocupación que le da facilidad para organizar la agenda a su manera. De esta manera siempre prioriza su tiempo para sus dos amores, principalmente para Nicolás, de 12 años, quien presenta el síndrome de asperger “nos dimos cuenta porque no hablaba, fue muy duro pero con amor vamos mejorando juntos”.
El problema de su hijo motivó a que Geovanny se inscriba en el programa de psicoeducación para padres, brindado por el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social, en donde aprende las terapias que ayudan a la evolución de ‘Nico’. “Hace tres años llegamos acá, realmente estoy muy agradecido porque se siente la mejora en mi hijo. Yo disfruto cada momento de mi etapa como progenitor, incluso cuando estoy aquí aprendiendo”.
Costumbres
La muerte impidió que Borja crezca bajo el amparo de su papá “nunca supe lo que era festejar el Día del Padre, por eso cuando mi mujer quedó embarazada fue una emoción incontrolable”. En la actualidad celebra en unión familiar y sobre todo cocinando para sus hijos “ese es el mejor regalo que puedo tener, que ellos me digan que quieren comer y yo preparárselos para compartir un momento muy feliz”.
La pasión por el arte del cine la heredó Nicolás, motivo por el cual han formado un equipo de producción entre padre e hijo. Los videos son publicados en su propio canal de YouTube, y el primer tema se denominó ‘Nico cocina’ “al principio me opuse porque el arte no es bien remunerado en el país, pero si a él le gusta mi deber es apoyarlo”, expresó Borja. (JD)
“No tuve a mi padre para darle feliz día. Ahora me doy cuenta que es hermoso compartir esta fecha con los hijos”.
Geovanny Borja
Padre de familia