Ayer por la mañana se le practicó la autopsia al cadáver de Ciro Ramos, quien perdió la vida en un pozo de agua el sábado por la tarde.
Ciro Ramos, de 52 años, murió el sábado por la tarde. Estaba al interior de una propiedad privada, ubicada cerca de la cooperativa de vivienda Nueva Aurora, por la vía a Quevedo, cuando de un momento a otro desapareció.
Minutos después hallaron uno de sus zapatos a la parte de afuera de un pozo de agua, de unos 20 metros de profundidad, aproximadamente. De inmediato llamaron a unidades de rescate y poco más de una hora después, rescataron su cadáver y lo trasladaron hasta el Centro de Investigaciones Forenses de Santo Domingo.
Dudas
Hasta este lugar llegaron ayer por la mañana bien temprano sus familiares. Unos arribaron desde Quinindé, otros de Chibunga y varios de sus hijos, de diferentes sectores de Santo Domingo, donde residen.
“Muchos lo conocían como ‘Manaba’, era muy trabajador. Hace un tiempo salió de Quinindé, donde vivía, y no tuvimos noticias de él hasta que sus hijos nos avisaron que había venido para acá. Con mucha alegría pactamos una reunión prevista para hoy (ayer), a la que aseguró que asistiría”, mencionó una de sus familiares.
Con dolor esa anhelada reunión tendrá lugar, pero será alrededor del ataúd de Ciro, primeramente en Quinindé, donde lo trasladaron para velarlo, y luego en Chibunga, en el cementerio, donde lo sepultarán junto a su padre y otros parientes que reposan en ese camposanto. (ARR)
CIFRA
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hijos procreó Ciro Ramos.
Versiones
Una de las hijas del ahora occiso relató que le contaron que su padre había pasado por la orilla del pozo mientras se dirigía a acompañar a un compañero que trabajaba en una chanchera. Otra pariente mencionó que supo que ‘Manaba’ estaba cargando unos balanceados y perdió el equilibrio y cayó al pozo, mientras que en el sitio donde falleció, también se dijo que al parecer estaría limpiando el pozo. Con estos relatos, los familiares tienen muchas dudas de cómo realmente se produjo la muerte de Ramos.