Turbia involución

Rodrigo Santillán Peralbo

El mundo evoluciona, cambia, se transforma, pero el Ecuador no avanza, o camina con extrema lentitud hacia el futuro; pero, hay poderosos sectores empresariales y de derechas neoliberales que ansían regresar al pasado y proponen consultas populares con turbias preguntas colmadas “de buenas intenciones”, como por ejemplo la llamada bicameralidad con un Congreso de senadores y diputados. Si se diese ese paso, habrá que reformar la Constitución

Si eso ocurriera, el país se verá obligado a elegir a senadores funcionales que antes solían convertirse en “patriarcas de la componenda”, o en simples “vacas sagradas” que imponían sus apetencias políticas, electorales o económicas. El circo se completaba con la cámara de diputados y el Pleno era, a menudo, un sainete con finas ironías, golpes con heridos, y barras que reían a carcajadas, o que, también, terminaban en grotescas broncas.

¿Qué se va a hacer con el derecho a elegir y ser elegidos, senadores y diputados? Ahora, sólo con asambleístas, muy pocos de excelente desempeño, y los más que no representan a nadie, o a muy pocos, con una imagen totalmente deteriorada y casi nula aceptación popular, casi no sirve para nada. Leyes importantes como la de la lucha contra la corrupción, tal vez sea, un montón de telarañas.

En el tumulto de intereses llueven ideas. Están listos los proyectos para desaparecer el Cpccs. Puede ser, pero diligentes asambleístas quieren arrebatarle la elección de dignatarios de alto nivel. Otra vez “el hombre del maletín” en pasillos de la Asamblea, se presenciará la toma y daca, y las más cursis negociaciones. Entre tanto, los poderosos empresarios quieren suprimir impuestos, imponer reformas laborales, pero se niegan a repatriar miles de millones de dólares que tienen en el extranjero.

[email protected]