Soldados en la calle, cacerolas y saqueos en Santiago de Chile

Redacción ALBERTO PEÑA – SANTIAGO DE CHILE

EFE

Las calles de Santiago de Chile se han convertido en tierra de nadie a pesar de la presencia de miles de militares desplegados. Esto, mientras los estados de emergencia y toques de queda no evitan los saqueos y disturbios en la capital, donde se reproducen también en cada barrio con vecinos haciendo cacerolazos.

Recorrer las calles de la urbe chilena ofrece una imagen entre una aparente normalidad y el caos más desatado, una bipolaridad que se repite en cada barrio de Santiago mientras Carabineros y el Ejército son incapaces de tomar el control de la situación después de tres días de disturbios.

El Gobierno del presidente Sebastián Piñera decretó el estado de emergencia el sábado por la madrugada madrugada y ese mismo días se estableció un toque de queda que se extendió hasta ayer. Estas medidas excepcionales; sin embargo, no sirvieron para devolver la normalidad a la ciudad.

El estallido de las protestas se produjo en Santiago por el incremento en el precio del pasaje del metro y se alargan por tres jornadas, pero el fin de semana se extendieron a las ciudades de Coquimbo, La Serena, Valparaíso, Rancagua y Concepción. El alza del precio del metro fue la punta del iceberg del hartazgo de la sociedad por la carestía y la desigualdad del país.

Nuevo toque de queda
° El general de división del Ejército chileno Javier Iturriaga, responsable de la seguridad durante el estado de emergencia en la capital del país, ordenó ayer un nuevo toque de queda “para proteger la vida de todos” ante el agravamiento de los disturbios, que han dejado tres muertos. La medida durará hasta hoy.

Redacción ALBERTO PEÑA – SANTIAGO DE CHILE

EFE

Las calles de Santiago de Chile se han convertido en tierra de nadie a pesar de la presencia de miles de militares desplegados. Esto, mientras los estados de emergencia y toques de queda no evitan los saqueos y disturbios en la capital, donde se reproducen también en cada barrio con vecinos haciendo cacerolazos.

Recorrer las calles de la urbe chilena ofrece una imagen entre una aparente normalidad y el caos más desatado, una bipolaridad que se repite en cada barrio de Santiago mientras Carabineros y el Ejército son incapaces de tomar el control de la situación después de tres días de disturbios.

El Gobierno del presidente Sebastián Piñera decretó el estado de emergencia el sábado por la madrugada madrugada y ese mismo días se estableció un toque de queda que se extendió hasta ayer. Estas medidas excepcionales; sin embargo, no sirvieron para devolver la normalidad a la ciudad.

El estallido de las protestas se produjo en Santiago por el incremento en el precio del pasaje del metro y se alargan por tres jornadas, pero el fin de semana se extendieron a las ciudades de Coquimbo, La Serena, Valparaíso, Rancagua y Concepción. El alza del precio del metro fue la punta del iceberg del hartazgo de la sociedad por la carestía y la desigualdad del país.

Nuevo toque de queda
° El general de división del Ejército chileno Javier Iturriaga, responsable de la seguridad durante el estado de emergencia en la capital del país, ordenó ayer un nuevo toque de queda “para proteger la vida de todos” ante el agravamiento de los disturbios, que han dejado tres muertos. La medida durará hasta hoy.

Redacción ALBERTO PEÑA – SANTIAGO DE CHILE

EFE

Las calles de Santiago de Chile se han convertido en tierra de nadie a pesar de la presencia de miles de militares desplegados. Esto, mientras los estados de emergencia y toques de queda no evitan los saqueos y disturbios en la capital, donde se reproducen también en cada barrio con vecinos haciendo cacerolazos.

Recorrer las calles de la urbe chilena ofrece una imagen entre una aparente normalidad y el caos más desatado, una bipolaridad que se repite en cada barrio de Santiago mientras Carabineros y el Ejército son incapaces de tomar el control de la situación después de tres días de disturbios.

El Gobierno del presidente Sebastián Piñera decretó el estado de emergencia el sábado por la madrugada madrugada y ese mismo días se estableció un toque de queda que se extendió hasta ayer. Estas medidas excepcionales; sin embargo, no sirvieron para devolver la normalidad a la ciudad.

El estallido de las protestas se produjo en Santiago por el incremento en el precio del pasaje del metro y se alargan por tres jornadas, pero el fin de semana se extendieron a las ciudades de Coquimbo, La Serena, Valparaíso, Rancagua y Concepción. El alza del precio del metro fue la punta del iceberg del hartazgo de la sociedad por la carestía y la desigualdad del país.

Nuevo toque de queda
° El general de división del Ejército chileno Javier Iturriaga, responsable de la seguridad durante el estado de emergencia en la capital del país, ordenó ayer un nuevo toque de queda “para proteger la vida de todos” ante el agravamiento de los disturbios, que han dejado tres muertos. La medida durará hasta hoy.

Redacción ALBERTO PEÑA – SANTIAGO DE CHILE

EFE

Las calles de Santiago de Chile se han convertido en tierra de nadie a pesar de la presencia de miles de militares desplegados. Esto, mientras los estados de emergencia y toques de queda no evitan los saqueos y disturbios en la capital, donde se reproducen también en cada barrio con vecinos haciendo cacerolazos.

Recorrer las calles de la urbe chilena ofrece una imagen entre una aparente normalidad y el caos más desatado, una bipolaridad que se repite en cada barrio de Santiago mientras Carabineros y el Ejército son incapaces de tomar el control de la situación después de tres días de disturbios.

El Gobierno del presidente Sebastián Piñera decretó el estado de emergencia el sábado por la madrugada madrugada y ese mismo días se estableció un toque de queda que se extendió hasta ayer. Estas medidas excepcionales; sin embargo, no sirvieron para devolver la normalidad a la ciudad.

El estallido de las protestas se produjo en Santiago por el incremento en el precio del pasaje del metro y se alargan por tres jornadas, pero el fin de semana se extendieron a las ciudades de Coquimbo, La Serena, Valparaíso, Rancagua y Concepción. El alza del precio del metro fue la punta del iceberg del hartazgo de la sociedad por la carestía y la desigualdad del país.

Nuevo toque de queda
° El general de división del Ejército chileno Javier Iturriaga, responsable de la seguridad durante el estado de emergencia en la capital del país, ordenó ayer un nuevo toque de queda “para proteger la vida de todos” ante el agravamiento de los disturbios, que han dejado tres muertos. La medida durará hasta hoy.