El censo de población y vivienda se realizará en noviembre de 2020, cuyos resultados servirán como insumo principal para la planificación del Ecuador hasta 2030, en todos los niveles de gobierno.
El objetivo de este estudio es obtener datos para definir cuántos somos, dónde estamos y en qué situación vivimos. Además, se investigarán nuevos aspectos relacionados con criterios de género, movilidad humana, pueblos, y personas con discapacidad. El censo en un instrumento básico para construir un sistema de inteligencia de territorio que genere información confiable de las condiciones de vida de la población, con la finalidad de ser más efectivos en el diseño de las políticas públicas.
Los resultados obtenidos otorgarán una radiografía de nuestra realidad, ya que hasta ahora se trabaja con datos proyectados sobre la información del último censo (2010), que en muchos casos puede ser demasiado subjetiva, desactualizada e irrelevante.
Por ejemplo, en nuestra Provincia, la construcción de los planes de desarrollo de los Gads considera como insumo una población de 450 mil habitantes proyectados en el 2019, dato que a simple vista parecería irreal, y con derecho a confusión por la gran cantidad de población flotante que migra a esta zona con fines comerciales y de subempleo.
Por otro lado, para los políticos que sueñan que los datos actualizados podrían otorgar una curul más en la Asamblea, se debe tomar en cuenta que es poco probable que aquello ocurra, ya que se debería contar con una población superior a 550 mil habitantes.
Esperemos que esos resultados estén disponibles para 2021, donde un nuevo Gobierno entrará en funciones, lo que le permitiría mejorar sus procesos de planificación gracias a la información actualizada.
El censo de población y vivienda se realizará en noviembre de 2020, cuyos resultados servirán como insumo principal para la planificación del Ecuador hasta 2030, en todos los niveles de gobierno.
El objetivo de este estudio es obtener datos para definir cuántos somos, dónde estamos y en qué situación vivimos. Además, se investigarán nuevos aspectos relacionados con criterios de género, movilidad humana, pueblos, y personas con discapacidad. El censo en un instrumento básico para construir un sistema de inteligencia de territorio que genere información confiable de las condiciones de vida de la población, con la finalidad de ser más efectivos en el diseño de las políticas públicas.
Los resultados obtenidos otorgarán una radiografía de nuestra realidad, ya que hasta ahora se trabaja con datos proyectados sobre la información del último censo (2010), que en muchos casos puede ser demasiado subjetiva, desactualizada e irrelevante.
Por ejemplo, en nuestra Provincia, la construcción de los planes de desarrollo de los Gads considera como insumo una población de 450 mil habitantes proyectados en el 2019, dato que a simple vista parecería irreal, y con derecho a confusión por la gran cantidad de población flotante que migra a esta zona con fines comerciales y de subempleo.
Por otro lado, para los políticos que sueñan que los datos actualizados podrían otorgar una curul más en la Asamblea, se debe tomar en cuenta que es poco probable que aquello ocurra, ya que se debería contar con una población superior a 550 mil habitantes.
Esperemos que esos resultados estén disponibles para 2021, donde un nuevo Gobierno entrará en funciones, lo que le permitiría mejorar sus procesos de planificación gracias a la información actualizada.
El censo de población y vivienda se realizará en noviembre de 2020, cuyos resultados servirán como insumo principal para la planificación del Ecuador hasta 2030, en todos los niveles de gobierno.
El objetivo de este estudio es obtener datos para definir cuántos somos, dónde estamos y en qué situación vivimos. Además, se investigarán nuevos aspectos relacionados con criterios de género, movilidad humana, pueblos, y personas con discapacidad. El censo en un instrumento básico para construir un sistema de inteligencia de territorio que genere información confiable de las condiciones de vida de la población, con la finalidad de ser más efectivos en el diseño de las políticas públicas.
Los resultados obtenidos otorgarán una radiografía de nuestra realidad, ya que hasta ahora se trabaja con datos proyectados sobre la información del último censo (2010), que en muchos casos puede ser demasiado subjetiva, desactualizada e irrelevante.
Por ejemplo, en nuestra Provincia, la construcción de los planes de desarrollo de los Gads considera como insumo una población de 450 mil habitantes proyectados en el 2019, dato que a simple vista parecería irreal, y con derecho a confusión por la gran cantidad de población flotante que migra a esta zona con fines comerciales y de subempleo.
Por otro lado, para los políticos que sueñan que los datos actualizados podrían otorgar una curul más en la Asamblea, se debe tomar en cuenta que es poco probable que aquello ocurra, ya que se debería contar con una población superior a 550 mil habitantes.
Esperemos que esos resultados estén disponibles para 2021, donde un nuevo Gobierno entrará en funciones, lo que le permitiría mejorar sus procesos de planificación gracias a la información actualizada.
El censo de población y vivienda se realizará en noviembre de 2020, cuyos resultados servirán como insumo principal para la planificación del Ecuador hasta 2030, en todos los niveles de gobierno.
El objetivo de este estudio es obtener datos para definir cuántos somos, dónde estamos y en qué situación vivimos. Además, se investigarán nuevos aspectos relacionados con criterios de género, movilidad humana, pueblos, y personas con discapacidad. El censo en un instrumento básico para construir un sistema de inteligencia de territorio que genere información confiable de las condiciones de vida de la población, con la finalidad de ser más efectivos en el diseño de las políticas públicas.
Los resultados obtenidos otorgarán una radiografía de nuestra realidad, ya que hasta ahora se trabaja con datos proyectados sobre la información del último censo (2010), que en muchos casos puede ser demasiado subjetiva, desactualizada e irrelevante.
Por ejemplo, en nuestra Provincia, la construcción de los planes de desarrollo de los Gads considera como insumo una población de 450 mil habitantes proyectados en el 2019, dato que a simple vista parecería irreal, y con derecho a confusión por la gran cantidad de población flotante que migra a esta zona con fines comerciales y de subempleo.
Por otro lado, para los políticos que sueñan que los datos actualizados podrían otorgar una curul más en la Asamblea, se debe tomar en cuenta que es poco probable que aquello ocurra, ya que se debería contar con una población superior a 550 mil habitantes.
Esperemos que esos resultados estén disponibles para 2021, donde un nuevo Gobierno entrará en funciones, lo que le permitiría mejorar sus procesos de planificación gracias a la información actualizada.