La falta de dinero para comprar un ataúd, hizo que el cadáver de Sandra Elizabeth Rojas Vélez, de 53 años de edad, sea velado por varias horas sobre una mesa en la sala de la humilde vivienda ubicada en el barrio Bélgica, sector 3 de la cooperativa Nueva Concordia, donde vivía junto a su esposo e hijos.
La mujer murió la mañana de hoy lunes, presuntamente por un coma diabético, sus hijos en su afán de salvarle la vida la trasladaron al centro de salud La Concordia, pero los médicos del área de emergencia, solo comprobaron su deceso.
“Mi madre sufría de diabetes, en los últimos días estuvo muy deprimida porque no podía trabajar en su pequeño restaurante que tenía por el sector parque de El Chavo, a eso súmele el encierro debido a la cuarentena y la falta de dinero, no aguantó más y la glucosa se le subió mucho y murió”, indicó, Jeniffer Ochoa Rojas, hija de la occisa.
Alcalde les donó ataúd
La atribulada joven, agregó que llevaron el cadáver de su madre nuevamente a su casa, donde decidieron velarla en una mesa, hasta que recibieron una llamada del alcalde de La Concordia, David Álava, quien les donó un ataúd, para darle sepultura.
“Gracias al Alcalde, que en cuanto se enteró de la situación que estábamos pasando nos hizo llegar de forma inmediata su ayuda, ahora por lo menos podremos darle sepultura a nuestra madre dentro de un ataúd; su muerte no tuvo nada que ver con el coronavirus”, aclaró, Jeniffer Ochoa Rojas. (JAR)