Es de conocimiento público que los árboles constituyen verdaderos pulmones naturales, no solamente porque nos proporcionan oxígeno, y absorben el CO2 que afecta la salud de las personas, sino también por que contribuyen a bajar la temperatura del aire y mejoran la salud física y mental.
Por ello en todo el mundo existe interés en sembrar árboles en las pequeñas y grandes ciudades que han pasado a ser denominadas ecológicas, especialmente en China en donde se está aplicando lo que se conoce como la arquitectura verde, que busca reducir los niveles de contaminación del aire.
Estos árboles, por otra parte, con una poda adecuada, mejoran la estética de las ciudades; pero en Santo Domingo, observamos que a los árboles sembrados en las principales avenidas de la ciudad, luego de que se los ha dejado desarrollar, en vez de podar simplemente sus ramas y follaje, se mutila los árboles cortándoles el tronco principal lo cual da un aspecto nada agradable, porque los brotes que nacen después desordenadamente en nada mejoran su apariencia. No sé si esté equivocado pero las ocasiones que he visitado algunas ciudades de Europa entre ellas: París, Berlín, Londres, etc. he puesto especial interés en observar los arboles sembrados en estas ciudades en donde se los ha dejado desarrollarlos en toda su magnitud al estado que por su altura compiten con los grandes edificios, con podas adecuadas.
Consiguientemente es necesario realizar un buen manejo de la poda, respetando las formas naturales de los árboles, que a no dudarlo mejorará el ornato y la estética de la ciudad.