Virtudes: Despertar la vida interior

En el momento histórico actual, y tomando en cuenta la cultura y educación popular, la gran mayoría de seres humanos no poseen el conocimiento que le permita descubrir y experimentar sus virtudes.

En estas condiciones la sumatoria de experiencias no contribuye para nada al desarrollo de la vida interior. La duda, el miedo, la ansiedad o la búsqueda desesperada de placer, no alcanzan a brindar ese estado de serenidad, plenitud o realización que todos los seres humanos buscamos.

Si entendemos que el Ser Humano es mucho más que una realidad física y psicológica, comprenderemos que hay en su interioruna Realidad Espiritual que exige ser vivida:

  • Hay un sentimiento altruista que le vincula con el otro y que le invita a hacer vínculos profundos, más allá de los intereses personales; a valorar vínculos que no son necesariamente los de sangre, y en la que también existe la posibilidad de apoyarse, aprender y crecer; esa virtud es la “DEVOCIÓN”
  • Hay una virtud que puede guiar esa curiosidad natural que indaga sobre la naturaleza íntima de las cosas, que pregunta sobre los fenómenos que sobrecogen los sentidos o los pensamientos, que puede llevarnos a la comprensión, acercarnos a la certeza; esa virtud es la “INVESTIGACIÓN”
  • Hay una virtud que le da al Ser Humano la posibilidad de ejercitar su verdadero poder, el de su voluntad; más allá de los apetitos e impulsos de su personalidad, existe la posibilidad de la acción generosa, desinteresada y altruista, esa virtud es el “SERVICIO”

El Ser Humano que ejercita estas virtudes, ha despertado a una Vida Interior que le acercará hacia la dignidad, el honor, la felicidad, la realización, y tal vez, incluso la Gloria.

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