El Consejo Nacional Electoral (CNE) organizó el Debate Presidencial 2021, donde participaron todos (16) los candidatos que aspiran ser el próximo Presidente de la República del Ecuador. Sin embargo, lo que menos hubo fue debate, convirtiéndolo más bien, en un circo político, destacando las acusaciones, careos, e indirectas mutuas. Si hay algo cierto, es que el porcentaje de electores indecisos sigue siendo mayoritario, y el debate no ayudó en mucho. Las expectativas de este tipo de actividades, es que la ciudadanía en general conozca, escuche y analice quién es la mejor opción para que administre el país en pro de nuestro futuro y condiciones de vida.
¿Qué nos dejó los debates? Rechazo de saludos, respuestas con letra de canciones, candidatos “drogados”, entre otros shows más que no dan gracia alguna. Pero no todo fue malo; unos pocos candidatos -menos conocidos- intentaron darle un toque de seriedad a esta actividad, exponiendo sus propuestas y cómo ejecutarlas, y posteriormente pidiendo un voto consciente, sin que este sea denominado como “desperdiciar el voto”. Estamos a menos de dos semanas de las elecciones generales, y es preocupante la falta de difusión de propuestas serias de los candidatos presidenciales, dejando como consecuencia que ese porcentaje aún indeciso; vote nulo o en blanco. Generando el temor de un fraude electoral.
Cada uno de nosotros somos corresponsables del futuro de nuestro país. Por ello, no permitamos que nos gobierne “el más conocido y/o recomendado” o el que más dinero está derrochando en campaña. Recuperemos nuestra dignidad, no de ciertos grupos, sino de todos nosotros. Estimado lector(a), insisto, medite su voto. Que no se repita la historia de siempre, donde los únicos que pierden somos las y los ciudadanos.