Odebrecht en Ecuador

Expulsada del país, la empresa retornó con importantes contratos.

A la empresa constructora brasileña Norberto Odebrecht no “se le acabó la fiesta” en Ecuador, como lo dijera en octubre de 2008 el presidente, Rafael Correa, por la “estafa” de la construcción de la Central Hidroeléctrica San Francisco, un proyecto con una inversión de 317 millones de dólares, que incluso le mereció la expulsión del país en el año 2007.


Al contrario, la empresa está en todo su apogeo tras haber recibido nuevos contratos.

Esta es la historia

En junio de 2007, el propio presidente Correa encendió la segunda turbina para la generación hidroeléctrica, declarando inaugurada la obra, pero a escasos siete meses la planta suspendió sus operaciones, debido a severas fallas.


Odebrecht no pudo solucionar los problemas. El Gobierno enfrentó a la firma calificando como “una estafa” a la obra e inició acciones legales para terminar cuatro contratos que le habían sido adjudicados. Pero, en julio de 2010, el Gobierno y Odebrecht arribaron a un “convenio de reparación”.

Vuelve Odebrecht

En septiembre del mismo año, la Contraloría ‘desvaneció’ las ocho glosas por 77,7 millones de dólares que había establecido contra la constructora y en octubre de 2011 Odebrecht retornó a la lista de empresas elegibles de negociar en el país al adjudicársele un contrato por 18 millones de dólares para la reparación de un túnel de la central hidroeléctrica Pucará, en Pisayambo. No hubo licitación pública.

La oferta más alta

Por otra parte, la ‘Asociación Ruta Viva’, conformada por las empresas Hidrovo Estrada y Norberto Odebrecht, fue seleccionada para construir el Primer Tramo de la Ruta VIVA (vía de integración de los valles y de conexión con el aeropuerto de Quito) a un costo de 47’919.265,87 dólares.


Otras obras

Odebrecht también se adicionó el contrato de preparación del área (rellenos), para la construcción de la Refinería del Pacífico, a un costo de 229,9 millones de dólares.


La firma, igualmente, ofertó 124 millones de dólares y ofreció entregar en 32 meses la construcción del proyecto hidroeléctrico Manduriacu, en la cuenca del río Guayllabamba (Pichincha), para generar 62 megavatios.



También el Metro de Quito

En octubre del año pasado, tras distintas observaciones hechas por algunos concejales, la segunda fase de la obra del metro de Quito fue adjudicada al consorcio Acciona – Odebrecht. El anuncio lo hizo el alcalde Mauricio Rodas, quien indicó que la compañía presentó la oferta más baja en términos económicos y cumplió con las especificaciones técnicas solicitadas.


La fase 2 comprende 22 kilómetros de túnel y 13 estaciones. Esta obra unirá los 22 kilómetros que separan al norte del sur de la ciudad y viceversa en 34 minutos, y transportará unos 400 mil pasajeros por día. El monto de construcción de esta etapa asciende a 1.538 millones de dólares.