Los vecinos que residen cerca a las escalinatas ubicadas en la calle Sucre y Diego de Velásquez que conectan el centro de Ambato con el teatro al libre Ernesto Albán, aseguran estar preocupados por el incremento de la inseguridad en este sector.
Paredes llenas de grafitis, malos olores, obscuridad y descuido es el panorama que se evidencia en el lugar, donde en días pasados se encontró incluso una persona fallecida, aparentemente con signos de intoxicación alcohólica.
Desde tempranas horas de la noche el sector ya no es recomendable para transitar solos, aseguran los moradores, quienes comentan que jóvenes y adultos llegan hasta las escalinatas para hacer de este lugar su cantina pública.
Carmita Benalcázar, moradora del sector, manifestó que lleva cerca de un año viviendo en el lugar y permanentemente se escucha cuando los “borrachitos” están libando, puestos que muchas veces incluso sus conversaciones se suben de tono y terminan en peleas.
“No se puede ni dormir tranquilos porque se escucha bulla, peleas y nosotros nada podemos hacer”, dijo.
Martha Villena, de 28 años de edad, manifestó que hace poco tiempo fue víctima de un asalto cuando descendía por dichas escalinatas.
“Eran dos hombres que se nos acercaron a mi novio y a mi y nos pidieron dinero, por temor a que nos pase algo nosotros les dimos todo lo que teníamos”, aseguró
La joven manifestó que utilizaba frecuentemente esta ruta para bajar desde la Vicentina hasta el centro de la ciudad, pero desde que sucedió este incidente prefiere caminar por otro lugar.
Preocupación
Abraham Sánchez, morador del sector, manifestó que este lugar era tranquilo para vivir, pero desde hace algunos años se ha convertido en un sitio de inseguridad.
A decir del morador varios son los problemas que se presentan, entre ellos la falta de iluminación, ya que el lugar tiene alumbrado pero en la noche se torna obscuro y tenebroso, a esto se suma los grafitis.
“Como si fuera tierra de nadie, aquí vienen a beber gente de toda edad, incluso muchachos de colegio quienes se asientan aquí y se ponen a libar”, dijo.
EL DATO
Hace una semana un hombre fue hallado sin vida en el lugar.
Según el ciudadano el problema se incrementa los fines de semana cuando luego de que la policía retira a los libadores de la avenida Cevallos y bares del sector, estos arriban hasta las escalinatas a continuar con su bebida.
“Ellos utilizan incluso una construcción sin terminar donde hacen su guarida, lo que aquí se requiere es una regeneración, más iluminación y seguridad por parte de la Policía Nacional”, aseguró Sánchez. (FCT)