Operativo ‘de película’ en San Antonio de Pichincha

DESPLIEGUE. La oportuna intervención policial logró evitar el robo de miles de dólares en mercadería.
DESPLIEGUE. La oportuna intervención policial logró evitar el robo de miles de dólares en mercadería.

Uno de los sospechosos fue herido durante el enfrentamiento a ‘plomo’ con la Policía. Hay cuatro detenidos.

El operativo policial incluyó un cruce de balas entre gendarmes y sospechosos. Ocurrió aproximadamente a las 20:30 del jueves en San Antonio de Pichincha, noroccidente de la capital. Las autoridades seguían la pista de una banda dedicada al robo de locales comerciales durante aproximadamente un mes hasta que dieron en el ‘blanco’.

El personal de la Subdirección de Investigación de Inteligencia Antidelincuencial (UIAD), ‘pescó’ a los sospechosos ‘in fraganti’. Gracias a información de una fuente reservada se enteraron que los antisociales estaban preparando un golpe a un reconocido establecimiento dedicado a la venta de material para la construcción.

Los malhechores se percataron que la Policía los estaba rodeando. Todos se embarcaron en un vehículo e intentaron darse a la fuga, pero no les iba a ser tan fácil escapar. Tras una persecución, la Policía logró obstaculizar todas las vías de escape. Lo único que les quedaba a los ‘angelitos’ era lanzarse a una quebrada para esconderse entre la oscuridad y la maleza.

Según el mayor Jahlil Cabrera, jefe de operaciones de la UIAD, en el intento de fuga uno de los hoy detenidos abrió fuego en contra de los uniformados. La Policía respondió el ataque con sus armas de dotación y uno de los sospechosos resultó herido. El hombre fue trasladado a una casa de salud en condiciones estables mientras que el resto de la organización fue arrestada. Tres hombres y una mujer deberán rendir cuentas a la justicia por el atraco.

Momentos de pánico
El encargado del negocio, quien por temor a represalias prefirió no proporcionar sus nombres, contó que como todas las tardes, el jueves estaba por cerrar el local a las 17:30. De pronto apareció una pareja preguntando por mercadería. Sin embargo, todo era un montaje, pues apenas tuvieron la oportunidad sacaron un arma y apuntaron al trabajador.

El hombre estaba golpeado. Él recibió cachazos por oponerse al asalto. Junto al establecimiento existe una pequeña ‘guachimanía’ desde donde un guardia vigila una fábrica de bloques. El empleado les advirtió a los antisociales que ahí hay gente y que en cualquier momento pueden llamar a la Policía.

Sin embargo, los malandros planificaron todo. Llevaron a la víctima a esa casa, abrieron la puerta y ahí estaba el guardia y otras seis personas más maniatadas, entre ellos niños con mantas en la cara. Así pasaron al menos unas tres horas mientras los criminales llenaban un camión de mercadería robada. Luego de varios intentos, una de las víctimas logró zafarse y romper la puerta de una patada para pedir auxilio.

Finalmente, la Policía los puso a buen recaudo y aún adoloridos, formalizaron denuncias para que las autoridades tengan más elementos probatorios sobre el hecho delictivo. Entre las evidencias, los uniformados encontraron el revólver, un arma blanca, guantes, pasamontañas e incluso equipos de comunicación que los implicados usaban para planificar los ilícitos.

Cabrera señaló que los hoy detenidos operaban de la misma forma en toda la ciudad y advirtió que serían responsables de otros atracos perpetrados en esas circunstancias. (FLC)