Visita a Galápagos II

Por: Patricio Durán

En el artículo anterior había manifestado que las islas Galápagos son un verdadero paraíso, pero como todo paraíso tiene su serpiente, que se presenta de muchas formas. Una de ellas es el exceso de visitantes que demandan cada vez más servicios. La basura que se genera en todo el mundo, especialmente plásticos que llegan a las islas afectando los nidos de aves como pinzones, albatros, además de tortugas marinas.

Las islas Galápagos también están amenazadas por el cambio climático. Otro aspecto negativo es la migración, el crecimiento poblacional que no puede ser frenado de una manera adecuada. La competencia entre especies invasoras y endémicas. Las especies invasoras se reproducen rápidamente como la mora y maracuyá que son consideradas como plagas. La contaminación de los suelos y daño de los habitad de las especies, la traída de especies exóticas por la población.

Las “islas encantadas” han sido visitadas por personajes famosos como el rey Felipe de España, el príncipe Carlos de Inglaterra; estrellas de cine como Richard Gere, Harrison Ford, Arnold Scharzenegger, Michael Douglas, Glenn Close, Chevi Chase, Brad Pitt, Angelina Jolie, Harrison Ford; la visita romántica de Leonardo DiCaprio y su pareja la modelo israelí Bar Refaeli; millonarios como Bill Gates en su superyate “Alfa Nero”.

Mi última visita en el archipiélago de Colón coincidió con la presencia del presidente Lenín Moreno Garcés y la presidenta de Chile Michelle Bachelet. Tuve la oportunidad de conversar con el Primer Mandatario. Para sorpresa mía se acordó de una anécdota que tuve con él y que la publiqué en un artículo –Lenín y yo- en esta misma columna. ¿Qué haces aquí?, me preguntó. Yo le respondí que soy residente permanente y que me gusta mucho venir a las islas Galápagos para reconciliarme con la madre naturaleza.