María Sogso, agricultora de la Asociación de Producción de Astromelias, entidad que pertenece a la comunidad Puganza en Ambato, se suma a la lista de pequeños productores que comercializaron cebada maltera a la empresa Trigos y Cereales (Trigocer).
Ella recibió gratuitamente del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) dos kits tecnológicos de cebada con semillas, abonos, fungicidas, insecticidas y herbicidas, insumos necesarios para el desarrollo de la planta.
Estas semillas germinaron en una hectárea y una vez que cumplió el proceso de cultivo, obtuvo algo más de 30 quintales de este cereal, obteniendo por su comercialización 791 dólares.
Para que los productores puedan comercializar este cereal debieron cumplir parámetros de calidad, verificando la humedad relativa del grano al momento de la cosecha y la presencia de impurezas.
Lo recomendable para una comercialización es que el grado de cebada debe tener el 12% de humedad y el 1% de impurezas.
Ivonne Aguilar, delegada de la directora provincial del MAG Tungurahua, reconoció el compromiso asumido por los productores que participaron en este ciclo de cultivo de la cebada.
“Este es el resultado de todo su esfuerzo. En Tungurahua tenemos productores emprendedores que creen en todos los esfuerzos que realiza el Gobierno para potencializar las tierras cultivables, a través del fomento a la producción de la cebada”. (RMC)