Eran eso de las 09:30 de ayer cuando, personal del Cuerpo de Bombero de Cevallos recibió la alerta de que había un hombre en una de las torres del interconectado que suministra energía a nivel nacional.
El hecho ocurrió en el sector de El Rosal en Mocha y tenía preocupados a los habitantes del caserío quienes, en primera instancia, creían que se trataba de alguien que intentaba quitarse la vida, sin embargo, con el pasar de los minutos el sujeto se identificó y señaló que lo que estaba haciendo era una protesta por el supuesto abandono que sufre la zona por parte de las autoridades.
Entre los vecinos murmuraban que esta no sería la primera vez que Leonardo Bayas, protagonista de la historia, toma una medida de este tipo pues hace poco más de un año se encadenó a la entrada de la escuela de la comunidad para exigir que esta no sea cerrada.
La preocupación de los Bomberos y Policía no solo se debía a la altura a la que se encontraba el hombre, si no que estaba en una torre de 230 mil voltios.
En primera instancia, a la mitad de la torre, los de la ‘casaca roja’ lograron llegar a Leonardo, quien al verlos decidió subir a la parte más alta y desde ahí pedir que se garanticen sus derechos.
DATO
Leonardo Bayas tiene aproximadamente 60 años y es relojero de profesión.
Fernando Bayas, cabo del Cuerpo de Bomberos, dio a conocer que el protestante exigía la presencia del Alcalde de Cevallos para bajar y hablar con el directamente y exponerle sus inquietudes y las necesidades de todas las personas del caserío.
Luego de una larga charla telefónica, con alguien que tomó el lugar del burgomaestre para convencerlo de que baje, Leonardo con paso firme y seguridad empezó el descenso de los alrededor de 80 metros que tiene la torre. Con un salto de no más de un metro el sujeto puso sus pies en la tierra donde lo aguardaban policías, bomberos y personal de prehospitalario del Ministerio de Salud Pública para verificar su estado de salud.
Su versión
Una vez abajo el protestante dio a conocer que habría emprendido su ascenso a eso de las 02:00. En el suelo lo primero que pidió fue agua pues no había bebido ni comido nada por alrededor de nueve horas y 30 minutos, tiempo que le tomó su travesía que paralizó a todo el caserío.
“A mí la virgen me dijo que tenía que hacer esto para que las autoridades nos tomen en cuenta”, sostuvo Leonardo.
Una vez que los paramédicos verificaron que el hombre se encontraba en buen estado emprendió una caminata hacia el cementerio del lugar, en donde se refrescó y nuevamente hizo el pedido a las autoridades de que vean la necesidad que tiene El Rosal de pertenecer a Cevallos y no a Mocha.
Para finalizar y antes de subirse al patrullero dijo que “me siento contento porque he hecho lo que Nuestra Señora de la Paz me mandó y eso me da satisfacción”, mencionó.
La población
Klever Secaira, presidente del caserío, dijo que este caso es preocupante pues temen que en cualquier momento Leonardo se pueda hacer daño. Por eso hizo un llamado a su familia para que esté más pendiente de él.
Hasta el lugar también llegó Clelia Montero, prima del implicado, y señaló que la esposa de Leonardo estaba de viaje en el oriente.
“No sabemos qué le pasa ni por qué hace estas cosas y la situación ya es preocupante”, dijo la mujer.
Ya sobre las 12:00 personal de la Policía subió a un patrullero a Leonardo para trasladarlo hasta una casa de salud en donde verificarán su estado de salud física y mental. (NV)
Opinión psicológica
Oscar Pérez, responsable de Salud Mental del Distrito 18D01, señaló que el hombre puede tener una alteración de estado de conciencia, ya que asegura que habla con la virgen y ella le responde.
Ante eso recomendó que toda la familia reciba soporte psicológico para ayudar al sujeto y así evitar que en uno de sus delirios pueda cometer algún acto que atente contra su vida o la de los suyos.
CIFRA
96 Páginas de un cuaderno detallan específicamente y con claridad lo que, supuestamente, la virgen le mandó a hacer.