La fiesta y sus bemoles

José Naranjo

Estamos próximos a celebrar una edición más de la Fiesta de la Fruta y de las Flores, y esperamos que como todos los años esta nueva versión supere en lo positivo a todas las precedentes; que importante sería que en base a las experiencias se corrijan los errores y se potencialicen los aciertos señalados por los distintos protagonistas activos y pasivos de la vernácula fiesta ambateña y sean considerados para aportar al éxito incuestionable de la que hoy es la mayor celebración de los carnavales en Ecuador; seguramente el Comité Permanente debe llevar un registro detallado de todos los aspectos que en uno u otro sentido incidieron en lograr lo que hasta hoy se ha conseguido en tantos años de haberla instituido.

Uno de los números centrales sin duda es el desfile que se realiza el día domingo, el cual presenta el atractivo especialísimo de sus carros alegóricos elaborados con frutas y flores naturales, y otros productos elaborados por la industria y artesanía ambateña; justamente este desfile es hoy publicitado y trasmitido en forma directa por medios de radio y televisión locales y nacionales, para lo cual se sugiere que el Comité Permanente les provea de un guión que contenga la información exacta de quién o quiénes son los diseñadores, constructores y detalles de los materiales y técnicas usadas en la elaboración de dichos carros alegóricos, de lo cual tengo entendido se tiene todos los detalles requeridos por los organizadores a los participantes en los concursos respectivos.

El año pasado la exposición de artes plásticas que se da alrededor del parque Montalvo tuvo algunos inconvenientes en su organización, de lo cual sugerimos que se aproveche para que sea una especie de bienal popular con reglas y normas adecuadas que magnifiquen su calidad e interés. No puedo dejar de señalar lo importante que significa la limpieza de la ciudad en esos días, esto a pesar de que coincide con la campaña electoral.