Redacción QUITO
A las 08:30 de hoy, el juez Geovanny Freire fijó la reinstalación de la audiencia de apelación solicitada por el exvicepresidente Jorge Glas.
El juez iba a leer su resolución al pedido de que Glas sea trasladado de la prisión en Latacunga a la Cárcel 4, en Quito.
Sin embargo, la audiencia no se pudo instalar porque Diego Cobo, representante de la Secretaría de Derechos Humanos y coordinador de la cárcel 4, no acudió. Eran las 08:35, estaban las puertas cerradas y el juez no esperó más a que se presentara Cobo. Harrison Salcedo, abogado de Glas, también estaba en la sala a la espera.
«Es increíble la actuación del funcionario», criticó el juez e inmediatamente anunció la sanción: el pago de cuatro salarios básicos por no acudir al llamado. Además, dijo que oficiará al titular de la Secretaría «a que analice la actuación displicente» de Cobo.
Debido a que no acudió, Freire no pudo leer su sentencia. Tendrá que volver a convocar a las partes para reinstalarla.
«En un acto que viola todos los principios de lealtad procesal, la obligación jurídica que tenía a comparecer, no lo ha hecho», cuestionó Salcedo. A su criterio no existe justificación porque la Secretaría puede enviar a cualquier delegado.
Por eso, su lectura es que existe «suspicacia» y una «artimaña de carácter político» para frenar «lo inevitable», porque durante la audiencia Cobo se equivocó e inicialmente dijo que estaba de acuerdo con la apelación. (AGO)