Las ventas autónomas en la ciudad han generado problemas de movilidad, seguridad y orden.
Ricardo Moyolema · La proliferación del comercio informal es uno de los principales inconvenientes que enfrenta Ambato actualmente, pues cada vez son más las personas que están optando por expender sus productos en la vía pública.
Frutas, hortalizas, carnes, lácteos, mariscos, comida preparada y hasta ropa se puede encontrar en las principales calles de la ciudad o en los alrededores de los mercados, situación que ha generado malestar en la ciudadanía y en aquellos comerciantes que realizan esta actividad de manera legal.
Situación
El comercio informal en Ambato se desarrolla en varios sectores, siendo el punto más álgido el centro de la urbe.
A pesar de los controles y operativos, los vendedores ocupan el espacio público para expender sus productos, en época navideña por ejemplo se forma una feria nocturna que se ubica en la avenida Cevallos, lo mismo pasó durante la Fiesta de la Fruta y de las Flores en otras calles céntricas del cantón.
Los lunes también se forma una feria de mascotas en los alrededores del mercado América, y otra de ropa y zapatos en las afueras del Mayorista Textil.
En Ambato según cifras del Instituto Ecuatoriano de Estadística y Censos (INEC), la cifra de subempleo en diciembre de 2018 llegó al 11,6%, lo cual posiciona a la ciudad como la tercera a nivel nacional con el mayor número de personas sin empleo adecuado.
Ana Constante, ambateña, mencionó que en los últimos años algunas calles del centro de la ciudad se han convertido en “mercados” por la cantidad de vendedores autónomos. “Ya es hora de que se hagan respetar las ordenanzas y que se reubique a los informales en un espacio adecuado”, aseveró.
Trabajo
Fernando Haman, director de Servicios Públicos del Municipio de Ambato, mencionó que desde el inicio de su gestión puso a disposición 512 puestos de la Red de Plazas y Mercados para los comerciantes informales, de ellos solo cinco han sido ocupados hasta la fecha.
“La informalidad es producto de la crisis económica que atraviesa el país, esto ha provocado que la gente realice esta actividad”, mencionó el funcionario, quien indicó que es necesario que la gente colabore y compre los productos en los centros de acopio.
Haman aseguró que en los últimos meses se han realizado alrededor de 175 operativos de control, los cuales es desarrollan en coordinación con los agentes de Control Municipal y los administradores de los centros de comercio.
De igual forma indicó que para mejorar las ventas de los mercados se ha implementado un proyecto de difusión para promover el comercio formal, además, dijo que los vendedores han recibido capacitaciones sobre atención al cliente, manejo de alimentos, entre otros temas para mejorar el servicio a la ciudadanía.
Estudio
Fidel Viteri, director del Consejo Municipal de Seguridad Ciudadana de Ambato (Comseca), indicó que se ha tratado de cambiar el procedimiento de los agentes de Control Municipal para que no sean considerados entes represores, sino como personal preventivo.
Viteri indicó que esta entidad no está en contra de la actividad comercial o económica de las personas, sino que se encarga del control de los bienes y de los espacios públicos.
El funcionario aseguró que la Municipalidad realizó un estudio técnico y estadístico en donde se determinó a más de 3 mil 500 personas dedicadas al comercio informal, de ellas más de 2 mil se dedican al expendio de comida preparada, mientras que el restante son agricultores del sector indígena.
El director del Comseca mencionó que el número de agentes de Control Municipal es insuficiente, pero que se vigila de una forma integral. (RMC)
Cifras de Ambato a diciembre de 2018 INEC
Tasa de empleo adecuado
52,6%
Tasa de desempleo
3,4%
Pobreza
8,4%
Extrema pobreza
2,1%
Subempleo
DATOS INEC REALIZADO POR DIARIO LA HORA
Periodo Subempleo en Ambato
Diciembre 2010 6,8%
Diciembre 2011 6,1%
Diciembre 2012 6,1%
Diciembre 2013 9,5%
Diciembre 2014 9,4%
Diciembre 2015 10,7%
Diciembre 2016 17,0%
Diciembre 2017 15,2%
Marzo 2018 15,6%
Junio 2018 13,2%
Septiembre 2018 14,2%
Diciembre 2018 11,6%
Movilidad
Todos los lunes se forma una extensa feria en la calle Tomás Sevilla, la cual inicia en la avenida 12 de Noviembre y termina en la plaza Primero de Mayo. Los comerciantes informales optan por instalar sus negocios en las veredas y en la vía obstaculizando por completo el tránsito vehicular y peatonal.
Son alrededor de 10 cuadras repletas de vendedores autónomos que ofertan un sinnúmero de productos y uno de los problemas radica en las transversales de la Tomás Sevilla, en donde los conductores deben esquivar a los mismos comerciantes y a los transeúntes para movilizarse.
“Manejar y hasta caminar por aquí los lunes es un caos”, mencionó Mauricio Ortiz, quien vive cerca de la plaza Primero de Mayo y debe salir con su vehículo a retirar a su hija del colegio.
“Para nosotros como moradores esta situación es insostenible, hay días en que ni siquiera podemos sacar el carro”, aseguró Ortiz, quien indicó que no solo hay vendedores a pie, sino también varias camionetas y camiones que se parquean en las afueras de las viviendas para expender varios productos.
Para el morador es una prioridad la reubicación de los comerciantes, pues mencionó que no son las condiciones adecuadas para la venta de productos para el consumo humano.
Enfrentamientos
Agentes de Control Municipal y comerciantes informales han protagonizado varios enfrentamientos durante los últimos años, verdaderas batallas campales se han desarrollado principalmente en los alrededores de los mercados Modelo y Central.
En 2017 se registraron cuatro días de operativos continuos que terminaron con varios uniformados y ciudadanos heridos, tal fue la magnitud de la pelea que la mayoría de centros comerciales ubicados alrededor del mercado Modelo cerraron sus puertas para evitar daños materiales.
Sara Arias, una de las comerciantes que vio la batalla campal, señaló que hasta los adoquines de las veredas fueron utilizados como armas “cuando llegó la Policía Nacional incluso lanzaron gas lacrimógeno”, indicó.
En octubre de 2017 un grupo de comerciantes del mercado Mayorista Textil se enfrentó a los vendedores autónomos que suelen ubicarse en las afueras de este centro de acopio.
Los insultos de lado y lado encendieron la pelea, las piedras surcaban los cielos al igual que los palos y las botellas, mientras que la gente se concentraba en la intersección de la Bolivariana y Segunda Constituyente.
Varios heridos se registraron mientras la multitud correteaba a los supuestos informales, efectivos de la Policía Nacional llegaron al sitio, sin embargo, las agresiones no disminuyeron.
Pobreza y pobreza extrema
Los índices de pobreza y desempleo en la ciudad también repercuten en la proliferación del comercio informal, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), Ambato registró en diciembre del año pasado una tasa de desempleo del 3,4% y un 8,4% en el nivel pobreza.
La falta de empleo adecuado obligó a Óscar Muso a salir a las calles para vender productos de aseo como detergente, jabón y pasta dental.
Hace tres años empezó con este “nuevo reto” como dice, pues el trabajo de albañil ya no le daba dinero suficiente para mantener a su familia.
Muso aseguró que la actividad que realiza es una forma honesta de ganar dinero, “no estoy haciéndole mal a nadie, quisiera que las autoridades nos dejen vender o que nos ayuden con algún otro trabajo”, aseguró.
Desde Pilahuín, Rosa Teneda acude todos los lunes y miércoles al centro de la ciudad para vender papas y tomates, “si tuviera otro trabajo no estaría aquí aguantando el trato de los municipales”, mencionó Teneda, quien realiza esta actividad para mantener a sus dos hijos.
Para el economista y docente universitario, Jesús Ortiz, este inconveniente es un gran reto para la nueva administración municipal.
“Un censo de los comerciantes y la ubicación de zonas específicas para ellos en donde tengan más seguridad e incluso pagar algún tributo podrían mejorar la situación en la ciudad”, aseguró Ortiz.
Red de Plazas y Mercados
Bajas ventas de hasta el 40% se registran en los mercados de Ambato según Mauricio Carvajal, presidente de los comerciantes que integran la Red de Plazas y Mercados del cantón.
Esta situación ha obligado a varios comerciantes catastrados a dejar los centros de acopio para empezar a vender en las calles, mientras que otros han optado por recorrer los negocios cercanos para ofertar sus productos.
Según el criterio de Carvajal, el Municipio de Ambato ha hecho muy poco para controlar el aumento del comercio informal, pues no hubo controles suficientes ni acciones necesarias para reubicar a los vendedores autónomos.
“En las afueras de los mercados podemos ver delincuentes que se esconden entre los vendedores informales, la Policía ha intervenido y ha encontrado que hay gente que vende drogas”, indicó Carvajal.
María Curicama, vendedora de verduras en el mercado Modelo, mencionó que ninguna de las estrategias planteadas por el Cabildo para mermar el comercio informal ha causado efecto, pues parece que cada vez hay más gente realizando esta actividad afuera del centro de acopio.
“Nosotros pagamos impuestos, patentes y no ganamos nada, mientras afuera venden hasta más barato, ya es hora de que se plantee una solución definitiva”, dijo Curicama.
Protestas
El año pasado se realizaron dos marchas de comunidades indígenas, la primera se desarrolló en marzo de 2018 en rechazo a una agresión que un vendedor informal recibió por parte de un agente de Control Municipal, en aquella ocasión se entregó un pliego con 11 requerimientos a las autoridades del cantón.
La segunda manifestación se realizó en diciembre y tuvo el objetivo de presionar a las autoridades por la falta de respuesta a sus requerimientos, esta marcha llegó hasta las instalaciones del Municipio de Ambato en el centro de la ciudad donde se registraron dos enfrentamientos leves entre los comuneros y la Policía Nacional.
Segundo Choco, cabildo de Chibuleo San Francisco, mencionó en aquella ocasión que se sienten ignorados por parte de las autoridades, pues las peticiones no se tomaron en cuenta.
Parte de esta protesta fue Enrique Guato, miembro de la asociación de comerciantes informales de Ambato, quien mencionó que se sienten maltratados y quieren exigir su derecho al trabajo.
“Nosotros queremos que nos dejen trabajar al menos dos días a la semana, ya no queremos estar huyendo de los municipales”, dijo Guato.
Estas fueron las peticiones:
- Fortalecer las ferias comunitarias con infraestructura, capacitación y asistencia adecuada.
- Destitución inmediata del Policía Municipal.
- Declarar a la calle Tomás Sevilla zona para feria libre los días lunes.
- Que el Municipio de Ambato se declare como intercultural y se incluya a los pueblos indígenas en su accionar.
- Actualización catastral de los predios rurales con las autoridades comunitarias.
- Extensión del horario en el mercado Mayorista para los productores indígenas y campesinos.
- Gestionar espacios estratégicos para trabajadores autónomos indígenas.
- Revisar y reformar la Ordenanza Municipal de Plazas y Mercados para que haya equidad en la distribución de puestos.
- Revisar de forma inmediata los impuestos de los predios rurales considerando los avalúos reales.
- Regular y aprobar el transporte comunitario y de las parroquias rurales.
- Conformar un comité de seguimiento para que se vele el cumplimiento de los pedidos.