De perros y cultura

Un día cualquiera quise pasar por la “casa de todos” para leer o ver una película. Fue en la Casa de la Cultura Benjamín Carrión, Sede Nacional. Iba entrando por el vestíbulo cuando de pronto un perro blanco, mezcla de buldog, se abalanzó a atacarme. De no ser porque tenía una revista que entrega la Casa de la Cultura, el perro rabioso me hubiera destrozado una mano, ya que hizo añicos la revista. Reclamé a los guardias de quién era el perro, a lo que me respondieron que era de la Casa de Cultura. Deduje que si el perro hiere o mata una persona la que responde es la Casa. Esto lo denuncio para que lo que me paso a mí no le pase a nadie más, mucho menos a un niño. Alguien debe poner orden en esta institución pública.

Joselito Flores Muquis
CI: 1709067613