Mera le apuesta al turismo de aventura

La zona subtropical permite disfrutar de un clima agradable donde es fácil rodearse de mariposas multicolores, insectos nunca antes vistos, murciélagos, orquídeas y miles de plantas que guardan celosamente el ingreso a la Amazonía, es un paraje que se puede encontrar solo en Mera, ‘donde nace la vida’, como lo han denominado.

El cantón se encuentra al oeste de Pastaza, a escasos 30 minutos de Puyo y desde Ambato a una hora y media.

Forma parte de la reserva Ecológica de los Llanganates al lado oriental y el inicio de la Amazonía, razón para que Mera se caracterice por la biodiversidad en orquídeas, árboles maderables, aves e incluso una riqueza étnica, pues aquí confluyen varias nacionalidades indígenas.

Desarrollo turístico

En el cantón la cita con la aventura es ideal, desde largas caminatas con el riesgo emocionante de encontrase con animales e insecto, lanzarse en columpios gigantes, navegar a velocidad máxima en las aguas de sus ríos, o explorar las milenarias cavernas, es por ello que turistas de diferentes ciudades del país y del extranjero arriban a Mera.

Mishel Bergara, es una de las turistas que llegó desde Quito en busca de aventura y aseguró que la riqueza de cada rincón de este cantón es inigualable, por lo que sus tres días de estancia no son suficientes para la experiencia vivencial que ofrece este rincón del Ecuador.

Acción

Autoridades y emprendedores de servicios turísticos son quienes trabajan mancomunadamente para desarrollar el turismo, así lo evidenciaron a través del Primer Encuentro Nacional de Turismo Amazónico.

Según Gidmon Tamayo, alcalde de Mera, a través de esta propuesta se busca despertar conciencia sobre la importancia de la actividad turística, tanto para la economía local como para la conservación ambiental, ya que cuentan con una infinidad de sitos por descubrir, pero sobre todo algo que no muchos tienen y esos son los afluentes de agua cristalina que toman vida justamente en los bosques de Mera. (FCT)

Aventura. Varias cavernas conforman la ruta turística de este cantón.
Aventura. Varias cavernas conforman la ruta turística de este cantón.

Magia y encanto en las cavernas de Anzú

Uno de los atractivos más sobresalientes de Mera son las diversas cavernas de río Anzú, ubicado a unos pocos minutos al norte del centro cantonal.

Un sendero que propicia una caminata mágica se debe desarrollar para llegar a estas cavernas, las mismas que por estar en las faldas de la montaña, donde nace el río Anzú, están rodeadas de una gran cantidad de pendientes, las cuales mantienen bosques secundarios con ciertos residuos de bosques primarios, así como también variedad de animales que resguardan el sendero.

Una vez ya en las cavernas, figuras espectaculares formadas por la misma naturaleza durante miles de años se puede apreciar.

Formaciones que por acción del agua que se filtra en las cavernas y que contiene varios minerales dan lugar a las estalactitas que cuelgan de los techos y las estalagmitas que surgen desde el suelo de las cavernas.

Dos de estas cuevas naturales son las más conocidas una denominada ‘Unión de los continentes’, por la especie de fuerza que une las paredes de la misma y otra es la caverna llamada la ‘Copa del mundo’ debido a la figura que en una de las cámaras se destaca, similar a la copa mundial de fútbol.

Luis Chugcho, es uno de los guías que resguarda el atractivo, y asegura que en el lugar se desarrolla campamentos y es común que los turistas terminen maravillados con el sitio.

Para acudir deben comunicarse al Municipio de Mera para coordinar la guianza.

Belleza. En el lugar se puede acampar en un mirador que da al río Pastaza.
Belleza. En el lugar se puede acampar en un mirador que da al río Pastaza.

Tesoro natural en Paz Yaku

Arboles gigantes, aves, plantas medicinales y miles de historias resguardan la diversidad de la comunidad de Paz Yaku o Río de Paz en español.

En esta comunidad consideran tener ‘un tesoro natural’ al mismo que se prometieron cuidar, sobre todo de la deforestación, y es así que nace el emprendimiento turístico que involucra senderos, convivencia con comunidades indígenas, camping, avistamiento de aves y un columpio que permite llenar de adrenalina a los visitantes.

Aquí se puede degustar de los diferentes platos típicos de la zona como es el maito y disfrutar de la cultura del pueblo kichwa con las diferentes danzas y saberes.

Este lugar está rodeado por frondosos árboles a los que los nativos daban utilidad, entre ellos el famoso árbol de la sangre de drago. Además, cuenta con cabañas y guías que con un trato cordial hacen que los turistas siempre regresen.