Las instalaciones patrimoniales ubicadas en el centro de la ciudad suma 110 alumnos nuevos.
Las aulas y pasillos del edificio Patrimonial del Colegio Nacional Bolívar, hoy Unidad Educativa, vuelven a activarse con los estudiantes de la oferta de bachillerato técnico.
El espacio donde funciona actualmente el Instituto Tecnológico Superior y el Colegio de Artes Bolívar, ahora también acogerá a 13 docentes y 110 estudiantes de primero, segundo y tercero de bachillerato técnico de las especialidades de Informática y Contabilidad.
Varios diálogos y acuerdos hicieron posible la inauguración de las clases en el edificio Patrimonial a través de una ceremonia simbólica.
Nahomi Sanunga, estudiante del plantel, agradeció a las autoridades por el trabajo comprometido por el bienestar de sus compañeros. “Hemos retomado las clases en nuestro templo del saber donde se han forjado importantes historias”, resaltó.
Adicional a las oficinas administrativas del Museo Héctor Vásquez Salazar y de la Biblioteca Eduardo Mera se ha implementado seis salones de clase, dos laboratorios, el rectorado y vicerrectorado con el objetivo de brindar una enseñanza integral a los jóvenes de Tungurahua que asisten a esta unidad educativa. (RMC)
Las instalaciones patrimoniales ubicadas en el centro de la ciudad suma 110 alumnos nuevos.
Las aulas y pasillos del edificio Patrimonial del Colegio Nacional Bolívar, hoy Unidad Educativa, vuelven a activarse con los estudiantes de la oferta de bachillerato técnico.
El espacio donde funciona actualmente el Instituto Tecnológico Superior y el Colegio de Artes Bolívar, ahora también acogerá a 13 docentes y 110 estudiantes de primero, segundo y tercero de bachillerato técnico de las especialidades de Informática y Contabilidad.
Varios diálogos y acuerdos hicieron posible la inauguración de las clases en el edificio Patrimonial a través de una ceremonia simbólica.
Nahomi Sanunga, estudiante del plantel, agradeció a las autoridades por el trabajo comprometido por el bienestar de sus compañeros. “Hemos retomado las clases en nuestro templo del saber donde se han forjado importantes historias”, resaltó.
Adicional a las oficinas administrativas del Museo Héctor Vásquez Salazar y de la Biblioteca Eduardo Mera se ha implementado seis salones de clase, dos laboratorios, el rectorado y vicerrectorado con el objetivo de brindar una enseñanza integral a los jóvenes de Tungurahua que asisten a esta unidad educativa. (RMC)
Las instalaciones patrimoniales ubicadas en el centro de la ciudad suma 110 alumnos nuevos.
Las aulas y pasillos del edificio Patrimonial del Colegio Nacional Bolívar, hoy Unidad Educativa, vuelven a activarse con los estudiantes de la oferta de bachillerato técnico.
El espacio donde funciona actualmente el Instituto Tecnológico Superior y el Colegio de Artes Bolívar, ahora también acogerá a 13 docentes y 110 estudiantes de primero, segundo y tercero de bachillerato técnico de las especialidades de Informática y Contabilidad.
Varios diálogos y acuerdos hicieron posible la inauguración de las clases en el edificio Patrimonial a través de una ceremonia simbólica.
Nahomi Sanunga, estudiante del plantel, agradeció a las autoridades por el trabajo comprometido por el bienestar de sus compañeros. “Hemos retomado las clases en nuestro templo del saber donde se han forjado importantes historias”, resaltó.
Adicional a las oficinas administrativas del Museo Héctor Vásquez Salazar y de la Biblioteca Eduardo Mera se ha implementado seis salones de clase, dos laboratorios, el rectorado y vicerrectorado con el objetivo de brindar una enseñanza integral a los jóvenes de Tungurahua que asisten a esta unidad educativa. (RMC)
Las instalaciones patrimoniales ubicadas en el centro de la ciudad suma 110 alumnos nuevos.
Las aulas y pasillos del edificio Patrimonial del Colegio Nacional Bolívar, hoy Unidad Educativa, vuelven a activarse con los estudiantes de la oferta de bachillerato técnico.
El espacio donde funciona actualmente el Instituto Tecnológico Superior y el Colegio de Artes Bolívar, ahora también acogerá a 13 docentes y 110 estudiantes de primero, segundo y tercero de bachillerato técnico de las especialidades de Informática y Contabilidad.
Varios diálogos y acuerdos hicieron posible la inauguración de las clases en el edificio Patrimonial a través de una ceremonia simbólica.
Nahomi Sanunga, estudiante del plantel, agradeció a las autoridades por el trabajo comprometido por el bienestar de sus compañeros. “Hemos retomado las clases en nuestro templo del saber donde se han forjado importantes historias”, resaltó.
Adicional a las oficinas administrativas del Museo Héctor Vásquez Salazar y de la Biblioteca Eduardo Mera se ha implementado seis salones de clase, dos laboratorios, el rectorado y vicerrectorado con el objetivo de brindar una enseñanza integral a los jóvenes de Tungurahua que asisten a esta unidad educativa. (RMC)