Cambio de Constitución no aplaca protestas en Chile

RECLAMOS. Marcha de profesores y estudiantes ayer en Santiago. (AFP)
RECLAMOS. Marcha de profesores y estudiantes ayer en Santiago. (AFP)
RECLAMOS. Marcha de profesores y estudiantes ayer en Santiago. (AFP)
RECLAMOS. Marcha de profesores y estudiantes ayer en Santiago. (AFP)
RECLAMOS. Marcha de profesores y estudiantes ayer en Santiago. (AFP)
RECLAMOS. Marcha de profesores y estudiantes ayer en Santiago. (AFP)
RECLAMOS. Marcha de profesores y estudiantes ayer en Santiago. (AFP)
RECLAMOS. Marcha de profesores y estudiantes ayer en Santiago. (AFP)

Redacción SANTIAGO

AFP

El giro del Gobierno de Sebastián Piñera para iniciar un proceso de cambio a la Constitución heredada de la dictadura de Augusto Pinochet no convencía a todos los dirigentes políticos ni lograba acallar ayer las protestas sociales que entraron en su cuarta semana.

Miles de profesores y profesionales de la educación marcharon por la céntrica avenida Alameda, mientras que centenares de pobladores que exigen viviendas sociales se tomaron terrenos y bloquearon calles de mañana en la comuna de Peñalolén, en el este de Santiago.

Además, manifestantes de la salud y profesores entraron a los patios de la sede del Congreso en Santiago.

Para hoy, un centenar de organizaciones sociales llaman a paralizar el país. “El llamado es claro, se detiene toda la capacidad productiva del país”, dice una de las decenas de convocatorias que circulan en redes sociales.

“Marchamos por una educación mínima, porque se acaben las (privadas administraciones de fondos de pensiones) AFP, que suban el sueldo mínimo y por la dignidad de todas las personas”, dijo Natalia Valenzuela, 40 años, auxiliar de educación preescolar.

Reacción tardía
La actual Constitución, vigente desde 1980, ha tenido más de 200 modificaciones en más de 40 artículos, según dijo Piñera en una entrevista a El Mercurio.

El texto no reconoce, sin embargo, la responsabilidad del Estado de ofrecer como un derecho la educación y la salud, dos de las exigencias de los millones de chilenos que están en las calles desde el pasado 18 de octubre.

Redacción SANTIAGO

AFP

El giro del Gobierno de Sebastián Piñera para iniciar un proceso de cambio a la Constitución heredada de la dictadura de Augusto Pinochet no convencía a todos los dirigentes políticos ni lograba acallar ayer las protestas sociales que entraron en su cuarta semana.

Miles de profesores y profesionales de la educación marcharon por la céntrica avenida Alameda, mientras que centenares de pobladores que exigen viviendas sociales se tomaron terrenos y bloquearon calles de mañana en la comuna de Peñalolén, en el este de Santiago.

Además, manifestantes de la salud y profesores entraron a los patios de la sede del Congreso en Santiago.

Para hoy, un centenar de organizaciones sociales llaman a paralizar el país. “El llamado es claro, se detiene toda la capacidad productiva del país”, dice una de las decenas de convocatorias que circulan en redes sociales.

“Marchamos por una educación mínima, porque se acaben las (privadas administraciones de fondos de pensiones) AFP, que suban el sueldo mínimo y por la dignidad de todas las personas”, dijo Natalia Valenzuela, 40 años, auxiliar de educación preescolar.

Reacción tardía
La actual Constitución, vigente desde 1980, ha tenido más de 200 modificaciones en más de 40 artículos, según dijo Piñera en una entrevista a El Mercurio.

El texto no reconoce, sin embargo, la responsabilidad del Estado de ofrecer como un derecho la educación y la salud, dos de las exigencias de los millones de chilenos que están en las calles desde el pasado 18 de octubre.

Redacción SANTIAGO

AFP

El giro del Gobierno de Sebastián Piñera para iniciar un proceso de cambio a la Constitución heredada de la dictadura de Augusto Pinochet no convencía a todos los dirigentes políticos ni lograba acallar ayer las protestas sociales que entraron en su cuarta semana.

Miles de profesores y profesionales de la educación marcharon por la céntrica avenida Alameda, mientras que centenares de pobladores que exigen viviendas sociales se tomaron terrenos y bloquearon calles de mañana en la comuna de Peñalolén, en el este de Santiago.

Además, manifestantes de la salud y profesores entraron a los patios de la sede del Congreso en Santiago.

Para hoy, un centenar de organizaciones sociales llaman a paralizar el país. “El llamado es claro, se detiene toda la capacidad productiva del país”, dice una de las decenas de convocatorias que circulan en redes sociales.

“Marchamos por una educación mínima, porque se acaben las (privadas administraciones de fondos de pensiones) AFP, que suban el sueldo mínimo y por la dignidad de todas las personas”, dijo Natalia Valenzuela, 40 años, auxiliar de educación preescolar.

Reacción tardía
La actual Constitución, vigente desde 1980, ha tenido más de 200 modificaciones en más de 40 artículos, según dijo Piñera en una entrevista a El Mercurio.

El texto no reconoce, sin embargo, la responsabilidad del Estado de ofrecer como un derecho la educación y la salud, dos de las exigencias de los millones de chilenos que están en las calles desde el pasado 18 de octubre.

Redacción SANTIAGO

AFP

El giro del Gobierno de Sebastián Piñera para iniciar un proceso de cambio a la Constitución heredada de la dictadura de Augusto Pinochet no convencía a todos los dirigentes políticos ni lograba acallar ayer las protestas sociales que entraron en su cuarta semana.

Miles de profesores y profesionales de la educación marcharon por la céntrica avenida Alameda, mientras que centenares de pobladores que exigen viviendas sociales se tomaron terrenos y bloquearon calles de mañana en la comuna de Peñalolén, en el este de Santiago.

Además, manifestantes de la salud y profesores entraron a los patios de la sede del Congreso en Santiago.

Para hoy, un centenar de organizaciones sociales llaman a paralizar el país. “El llamado es claro, se detiene toda la capacidad productiva del país”, dice una de las decenas de convocatorias que circulan en redes sociales.

“Marchamos por una educación mínima, porque se acaben las (privadas administraciones de fondos de pensiones) AFP, que suban el sueldo mínimo y por la dignidad de todas las personas”, dijo Natalia Valenzuela, 40 años, auxiliar de educación preescolar.

Reacción tardía
La actual Constitución, vigente desde 1980, ha tenido más de 200 modificaciones en más de 40 artículos, según dijo Piñera en una entrevista a El Mercurio.

El texto no reconoce, sin embargo, la responsabilidad del Estado de ofrecer como un derecho la educación y la salud, dos de las exigencias de los millones de chilenos que están en las calles desde el pasado 18 de octubre.