UNIR implementará un sistema de ‘proctoring’ para garantizar la calidad de las evaluaciones

Los exámenes de UNIR se enfocan más en el razonamiento que en la memoria. Y utilizan herramientas digitales que evitan el plagio y garantizan la equidad de la evaluación.

Debido a la pandemia del Covid-19, diversas instituciones educativas han tenido que cambiar su metodología de evaluación presencial a modalidad en línea.

La Universidad Internacional de la Rioja (UNIR) experta en educación en línea, no fue la excepción. Hasta la fecha, UNIR realizaba la toma de exámenes de manera presencial para garantizar un sistema de evaluación de calidad, justo y seguro.

¿Cómo lograr una evaluación en línea que no pierda estas tres características? Rubén González, vicerrector de Ordenación Académica y Profesorado de la UNIR, explica que han desarrollado aplicativos informáticos que permiten garantizar la autenticidad de la evaluación.

Estrategias

UNIR ha optado por remplazar los exámenes memorísticos “que son susceptibles de ser copiados” por evaluaciones que se apoyan más en el razonamiento.

“De esta manera, se ha permitido a los alumnos incluso que tuvieran apuntes. Lo que importa es la capacidad para resolver el problema planteado”, dice González sobre los cambios implementados en los exámenes.

Desde el punto de vista tecnológico, la universidad desarrolló una aplicación que “de manera incremental, ha ido vigilando cada vez más exhaustivamente a nuestros alumnos, dentro del campus virtual”, explica González.

Dicha herramienta valida documentos de identificación que generan sistemas de bloqueo. Este mecanismo impide que el estudiante pueda consultar durante el examen páginas de Internet que no estén permitidas.

Herramientas telemáticas

González anuncia que están desarrollando un sistema con ‘proctoring’. Esta herramienta permite realizar evaluaciones allá donde se encuentre el estudiante, y pueden ser monitoreadas y vigiladas desde diferentes lugares a través del empleo de recursos telemáticos.

“Tendremos la posibilidad de hacer un estudio biométrico en el momento del examen para constatar que no se produce ninguna suplantación de identidad”, explica el vicerrector de Ordenación Académica y Profesorado de UNIR.

La herramienta será sometida a diversos estudios y proyectos piloto antes de ser implementada, ya que para UNIR resulta fundamental precautelar la seguridad informática de los estudiantes.

Se espera poder aplicar este sistema para septiembre próximo, según González. Pero antes se realizará una prueba con los estudiantes, pues es necesario que ellos lo autoricen.

Experiencia

UNIR inició las evaluaciones en línea a mediados de marzo de este año, ante la imposibilidad de viajar debido al coronavirus.

En UNIR, cada asignatura tiene hasta 10 modelos de examen distintos.“Rendir un examen virtual generaba mucha incertidumbre en los alumnos”, dice González. Por este motivo, UNIR trabajó con los estudiantes desde el primer momento. Así se logró que los estudiantes desarrollen la confianza necesaria para realizar una evaluación a distancia. “Con un soporte muy grande por parte de los tutores, hemos conseguido que los alumnos estén realmente satisfechos con la experiencia”.

Rubén González, vicerrector de Ordenación Académica y Profesorado de la UNIR
Rubén González, vicerrector de Ordenación Académica y Profesorado de la UNIR

Rendimiento

Uno de los datos relevantes de este mecanismo de evaluación, dice González, es solventar las dudas sobre si es más difícil aprobar con exámenes presenciales o virtuales, o si es más fácil copiar o no.

“Para resolver estas inquietudes realizamos un estudio comparativo de los resultados del examen en línea y descubrimos que la situación es la misma”, hace énfasis González.

Es decir, el número de aprobados y suspensos no ha variado con el cambio de modalidad. “En realidad, los estudiantes que durante el curso académico lo han ido haciendo bien, terminan aprobando”.

Otra estrategia que dificulta que se cometan fraudes durante las evaluaciones consiste en elaborar hasta 10 modelos de examen por cada asignatura: “Vamos combinando los modelos de examen por países y por franjas horarias, de manera que es muy difícil que se difundan las pruebas, porque no coinciden entre países y franjas”.

La UNIR trabaja arduamente para conseguir que cada evaluación tenga el mismo grado de dificultad.

Campus virtual, para sentirse ‘en casa’

Entrar a la evaluación a través de la plataforma (campus virtual) UNIR “ha disminuido el miedo de los alumnos”, ya que están familiarizados con el espacio, dice González.

El campus virtual acoge a más de 40 mil alumnos; con la pandemia los ingresos simultáneos aumentaron al punto de tener hasta 5 mil usuarios en una hora, sin que la página haya colapsado.El estudiante ingresa con su usuario y contraseña, y encuentra la sección ‘Exámenes’. El campus virtual permite que los docentes vean la hora de ingreso y salida del alumno, para que luego puedan calificar la prueba.

El actual reto de la evaluación virtual “crea un modelo más maduro, más sólido y con mayor calidad”, concluye el experto.

Para el mundo educativo, la pandemia ha sido una revolución, un incentivo. Lo que nunca hubiésemos planteado en una circunstancia normal, ha ocurrido de repente en solo tres meses”. Rubén González, vicerrector de Ordenación Académica y Profesorado de la UNIR.

A través de la tecnología, hay que lograr que el sistema educativo sea cada vez más satisfactorio para nuestros alumnos”, Rubén González, vicerrector de Ordenación Académica y Profesorado de la UNIR.