El inició de la libertad

La Independencia de Ambato es un hecho que llevó más de un día y que según los libros e historiadores inició con varios hechos 100 años antes y que terminó más de una década después, luego de varios enfrentamientos, saqueos y matanzas.

La incomodidad de los habitantes de la zona centro inició desde 1700 con varios levantamientos, una parte de esto fue provocado por el decaimiento de la economía española, agravado por el terremoto de 1698 que trajo consigo varias epidemias que azotaron a Tungurahua.

Caciques

Dentro de estos años se puede notar que la opresión no solo venía de los españoles o criollos, sino también de los indígenas que embestidos de la figura de caciques, aprovecharon su cargo para explotar y esclavizar a gente de su propia comunidad, uno de estos casos sucedió en Chibuleo y está documentado en el ‘Cuaderno para historia indígena’ escrito por el cronista vitalicio de Ambato Pedro Reino.

En este hecho Bonifacio Pilamunga, cacique principal de los Chibuleos y Tomabelas, trataba de obligar a que otro miembro de su comunidad siga cumpliendo la tarea de servidumbre en una de las haciendas del sector, a pesar de haber quedado libre por un tiempo, debido a que cumplió sus servicios de esclavo dentro de las mitas.

Terremotos

En 1797 otro terremoto afectó a Ambato, que junto a los hábitos de higiene acostumbrados en la época devinieron en nuevas epidemias y pobreza para los ambateños. Gerardo Nicola Garcés, historiador de la ciudad, comentó que a pesar de todas las circunstancias por las que atravesaba la región de Ambato, la corona española y sus representantes en el país no tuvieron consideraciones con los impuestos y tratos hacia la población.

Nicola aseguró que otro de los puntos que profundizaron los desacuerdos y el descontento de la población fueron los impuestos al alcohol, lo que comenzó a sentirse a partir de 1786, pues para ese tiempo lo que hoy se conoce como zona centro ya había provocado varios altercados con la corona española.

“Llegar al 12 de noviembre en el caso de Ambato, Riobamba, Latacunga, Guaranda tiene como una motivación el mal manejo de la economía, en cambio desde Guayaquil y Quito era motivado por lo económico pero también por lo político, donde no se sabía si hacer una república independiente de España o un territorio que dependa del rey, pero mientras tanto España estaba invadida por Francia”, contó Nicola.

Primer Grito de Independencia

Otro de los momentos históricos de los cuales formó parte Ambato y que fueron el inicio del camino para el 12 de noviembre de 1820, fue el apoyo a los próceres del Primer Grito de la Independencia del 10 de agosto de 1809.

En el siguiente texto se puede apreciar el civismo de aquella época y las palabras con las cuales Ambato se unió al Primer Grito de Independencia:

“En la Villa de San Juan de Ambato, a veintisiete de agosto de mil ochocientos nueve, hallándose en la iglesia matriz todos los cuerpos y restantes vecinos que se nominaban en el auto que lo mueve a excepción de Vicario Lisdo. Don José de Extrer, dijeron: que se conformaban con los principios que se habían adoptado en la muy Noble y muy Leal Ciudad y Corte de Quito para la creación de su Suprema Junta de Gobernativa interina”, reza el documento que fue emitido desde Ambato en apoyo al movimiento libertario.

Este es el primer intento que se produjo en Ambato y se encuentra documentando dentro de los libros de Gerardo Nicola López, cronista vitalicio de Ambato, en estos textos también se da cuenta que fue un pronunciamiento de todo lo que hoy es la provincia de Tungurahua.

“El corregimiento de Ambato, con todos sus principales pueblos como Píllaro, Pelileo, Quero y Santa Rosa se pronunció contra España el mismo Agosto de 1.809. El Clero Parroquial de casi todos los pueblos de las actuales provincias de Tungurahua y León (Cotopaxi) tomó como causa propia la emancipación de la Patria”.

Varios fueron los personajes de Tungurahua que en el Primer Grito de Independencia tomaron posición a favor de la causa libertaria, entre ellos se puede nombrar a Juan de Alarcón, cura de Quero, quien se fue en contra de sus superiores para mantener en el pueblo la idea de independencia.