Robos y asaltos a personas, vehículos, viviendas y ahora a pequeños negocios se han convertido en la principal preocupación en los diferentes barrios de Ambato.
Si bien los moradores reconocen que la Policía Nacional desarrolla un gran esfuerzo por cubrir las necesidades de seguridad, esto no es suficiente.
Es por ello que cansados ante la ola de crímenes han decidido tomar la batuta de la seguridad de su barrio a través del uso de la tecnología y sobre todo la organización.
Iniciativas
Según datos del Ministerio del Interior el índice de denuncias por robo a personas en Ambato es alto y se evidencia en las reacciones de los moradores, así por ejemplo en el sector de Ingahurco se han realizado marchas en contra de la delincuencia, pero lo más importante es la iniciativa de un trabajo conjunto para mejorar la condición de seguridad de los mismos.
Juan Carlos Miranda, jefe de la Policía Comunitaria de la Subzona Tungurahua, manifestó que en efecto son distintos barrios que tienen la iniciativa de propender un lugar más seguro para vivir, es así que se unen y buscan alternativas, entre ellas grupos de WhatsApp, brigadas, rondas, reuniones y capacitaciones en conjunto con la Policía Comunitaria.
“Es de suma importancia la iniciativa, incluso de una sola persona para que las acciones se activen”, dijo.
Según Miranda una vez que alguien se interesa por la seguridad los uniformados desarrollan reuniones o recorridos en los barrios con los mismos moradores, lo cual genera una percepción de seguridad y mayor confianza para que los vecinos se unan para cuidarse entre sí.
Como parte de esas acciones se instalan botones de seguridad, se capacita e incluso realizan el adecentamiento y la recuperación de espacios abandonados o mal utilizados.
Tome nota
Quienes deseen coordinar acciones con los uniformados pueden acercarse a la Unidad de Policía Comunitaria más cercana.
Resultados
En el barrio La Huerta de Pinllo los vecinos no quisieron recibir más noticias de asaltos en una calle que permanecía en mal estado, es por ello que se organizaron a través de WhatsApp y coordinaron con la Policía Comunitaria la recuperación de ese espacio.
Caso similar se vivió en la ciudadela Amazonas donde la ciudadanía se convocó para tomar cartas sobre la inseguridad y para ello pidieron asistencia de los uniformados quienes los capacitaron para la utilización de los botones de seguridad y alarmas comunitarias con las que se cuentan en el barrio.
Mishel Zurita, coordinadora del barrio Ingahurco, manifestó que este sector siempre se caracterizó por ser muy comercial, pero que últimamente la inseguridad creció, por lo cual decidieron organizarse a través de redes sociales y de esta forma hacer frente a este problema.
“Esta red nos ha ayudado a unirnos entre vecinos, emprendedores y negocios para poder echarnos una mano entre todos, por ejemplo a una vecina que le entregaron billetes falsos alertó a todos los negocios del sector”, dijo al tiempo de asegurar que esta iniciativa también sirve para impulsar los emprendimientos, por lo que todos los barrios deberían organizarse, “porque la unión hace la fuerza”. (FCT)