La docente jubilada María del Carmen Gálvez indicó que el 31 de agosto de 2017 presentó la renuncia voluntaria al Distrito de Educación Yacuambi – Zamora, para desvincularse del magisterio. Sin embargo, según la maestra, la presionaron para que firme la renuncia que contenía un formato ya preestablecido, quitándole la opción a presentar su propia deserción.
“El texto de la redacción de renuncia debe ser como yo desee sin ninguna presión ni ningún formato, nos dijeron que si no firmamos no dan el paso al cese de funciones, por lo tanto no había cómo renunciar”, explicó.
Dijo que han presentado una queja sobre el asunto a la Defensoría del Pueblo de Zamora, porque, a criterio de la maestra, se vulnera el propio derecho a la renuncia voluntaria.
Según contó Galvez, el Defensor del Pueblo les había manifestado que la Dirección Distrital no tenía que obligarlos a firmar ningún formato porque “sencillamente debían aceptar la renuncia en las condiciones en que nosotros la firmábamos”, refirió.