El país de los compadres

El Ecuador es gobernado por compadres.

Entre compadres se están llevando en peso todo lo que pueden, sin importarles nada de la gente, de la pandemia ni de la grave crisis económica y social a la cual ellos nos han sometido, amparados por la impunidad y la sinvergüencería.

Entre compadres se las arreglaron para llevarse más de 500.000.000 dólares de la ISSPOL, que lejos de servir y proteger a los ciudadanos no peor pudo protegerse y servirse a sí misma.

Hasta parece normal y esto debe dolernos profundamente, que a la misma institución policial se la haya estafado sin que ningún ministro, general o funcionario tenga la decencia de renunciar o, mejor aún, ir a la cárcel como se debería hacer con los estafadores.

Pero los compadres saben que no va a haber consecuencias, pues entre ellos se respaldan desde sus altos mandos políticos, públicos y privados.

A los compadres se le permite cometer cualquier delito como llevarse la plata destinada a la construcción de los hospitales; entregarles carnet de discapacidad o, peor aún, salir en avioneta cargados de millones por haber hecho tremendo negocio durante la pandemia. Los compadres son intocables y si quedan cabos sueltos se los manda a matar hasta dentro de las cárceles. Son mafiosos los compadres.

Así que la mayoría de ciudadanos estamos en las manos de 4 sapos y compadres que se hacen ricos mientras nosotros trabajamos y no hay Presidente o Ministro/a que pueda pararlos pues, claro está, son compadres.

Y compadres también hay en el CNE en donde quieren arreglar las elecciones admitiendo o inadmitiendo a dedo a los aspirantes para las próximas elecciones. Y de compadres también ha de tratarse cuando se liberan los precios de los combustibles o cuando se veta el Código de Salud.

Las instituciones y los sectores más importantes del país están en las manos de los compadres que se reparten la plata del Estado como botín entre piratas mientras que el pueblo sigue esperando medicinas, educación y dignidad económica y social.