En más de una ocasión ha dicho el presidente, Lenín Moreno, que sospecha que la intención de la agrupación narcoterrorista liderada por alias ‘Guacho’ jamás fue negociar o realizar un canje con el Gobierno de tres miembros de su organización delictiva detenidos en Ecuador por el equipo periodístico de diario El Comercio que fueron secuestrados y luego asesinados. En esa ocasión, el Gobierno estaba dispuesto a acceder al canje y se había diseñado una estrategia judicial para entregar a esos prisioneros.
Actualmente, se encuentra secuestrada en manos de ‘Guacho’ la pareja ecuatoriana conformada por Óscar Villacís, de 24 años, y Katty Velasco, de 20. En un video enviado como prueba de vida, el hombre le pide al presidente Moreno que les dé a los terroristas lo que pidan para que no les pase “lo que pasó a los periodistas”.
Sin embargo, el día en que el secuestro se hizo público, el ministro del Interior, César Navas, declaró: “no caeremos en su juego macabro”. En operativos recientes, se ha detenido a más miembros del frente Oliver Sinisterra, incluido un sobrino de ‘Guacho’ y su lugarteniente.
El Dato
24 y 20 años tiene la pareja actualmente secuestrada.
El director de la Fundación Regional de Asesoría en Derechos Humanos (Inredh), Luis Ángel Saavedra, considera que en este momento “el canje es mucho más difícil, porque la situación está polarizada y porque las dos personas secuestradas no tienen el peso político que tenían los tres periodistas”. “Entonces, si el Gobierno no actuó correctamente con los tres periodistas veo poco factible que por estas dos personas pueda sentirse presionado políticamente para negociar”. Él observa que el Gobierno se ha decantado por la vía militar.
Análisis
El abogado de Derechos Humanos Juan Pablo Albán, considera que no sería conveniente el canje porque “la señal que se enviaría a este grupo delincuencial si se cede a sus pedidos es que los secuestros son una vía efectiva para presionar al Gobierno, y el efecto de ello pudiera ser que incremente la frecuencia de este tipo de delito, ya no solo por la banda de alias Guacho sino otros grupos delincuenciales”.
De todos modos, ve que el “desenlace del secuestro del equipo de El Comercio exige medidas extraordinarias para evitar que la pareja secuestrada corra una suerte similar”.
El coronel (r) Alberto Molina considera que negociar con captores genera un mal precedente, pero que dependiendo de factores como la gravedad, la repercusión del país y de la víctima, pueden negociarse canjes por medio de organismos que tienen la experiencia, capacitación, recursos y neutralidad, como es el Comité Internacional de la Cruz Roja. (MMD)